Uno de los animales que distingue al país es el “Canis lupus baileyi” conocido como lobo mexicano que tiene presencia en México, Estados Unidos y Canadá.
Es tal su belleza e importancia como protector de los bosques en Norteamérica que el lobo se encuentra protegido debido al riesgo en que hace algunas décadas estuvo y del que, si bien no se ha librado, comienza a recuperarse.
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El Occidental visitó el Zoológico Guadalajara donde hay algunas especies de su tipo que funcionaron para lograr su preservación, ya que fueron muchos los años en los que los lobos se mantuvieron al borde de la extinción.
Ahí además de admirar su belleza cualquiera tiene oportunidad de conocer un poco más sobre el lobo mexicano, que por camada puede tener entre una y seis crías y su promedio de vida es de diez años. En el área donde se encuentran siempre hay familias viendo cómo se comportan, pues los lobos mexicanos además de ser atractivos por sí mismos encantan sobre todo a los más pequeños del hogar y es bien sabido que entre los primeros sonidos que animales que una niña o niño imita está el aullido de un lobo. Platicamos con David Espinosa, director técnico del Zoológico Guadalajara, quien explicó que la especie representa una historia de éxito para el zoológico tapatío que en este 2023 cumplió 35 años de funcionamiento.
“Participamos en programas para reproducción y conservación de animales, uno de los más sonados el lobo mexicano que es una especie propia del país con un animal que fue llevado al borde de la extinción y de hecho ya no había animales en estado silvestre y los únicos que había eran en zoológicos que fueron sacados de su medio natural para preservarlos y es una historia de éxito de lo que es la reproducción conservada”.
¿Cómo lo lograron?
Recuerda que originalmente el lobo mexicano habitaba en los estados fronterizos del sur de Estados Unidos, así como al norte y centro de México, pero a mitad del siglo pasado fue perseguido por ganaderos y cazadores y no quedó un solo lobo vivo en libertad. Quienes favorecieron su rescate fueron algunos particulares que albergaban un escaso número de ejemplares y partiendo de únicamente siete lobos mexicanos se estableció un programa de reproducción en cautiverio.
Población de lobos
En el caso del Zoológico Guadalajara, desde 1997 a la fecha han nacido 21 cachorros que representan un reservorio genético para seleccionar a los individuos que se reproducirán cada año para mejorar las características heredables e incrementar la variabilidad y la sobrevivencia a largo plazo. En el programa de conservación participaron diversas instituciones de México y Estados Unidos principalmente, pues son ambos países los que concentran la mayor presencia de los lobos mexicanos. Actualmente la población total de lobo mexicano supera los 450 individuos.
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Y la mayoría se encuentran en zoológicos de México y Estados Unidos, aunque también algunos fueron reintroducidos en su hábitat en Chihuahua y Sonora, pertenecientes a territorio nacional, así como en Arizona, Nuevo México, en Estados Unidos. En el Zoológico Guadalajara hay cuatro lobos machos que son parte del programa de recuperación de la especie.
Uno de ellos se llama “Séneca” que es un adulto mayor de 10 años de edad y tres de sus hijos, nacidos en una misma camada en el zoológico y que actualmente tienen 5 años de edad.
La importancia de estos animales en los ecosistemas
La presencia del lobo mexicano en los ecosistemas es clave para su equilibrio, pues al ser un depredador carnívoro regula las poblaciones de sus presas.