Ante las críticas que ha habido en torno al proyecto, el presidente municipal de Guadalajara, Pablo Lemus Navarro, defendió la instalación que se hará de una escultura de Luis Barragán en Paseo Fray Antonio Alcalde; no es la realización de una obra, es la recuperación de un nuevo espacio, enfatizó.

Hace un par de días se dio a conocer que como parte de los trabajos de ampliación de Paseo Alcalde, el ayuntamiento de Guadalajara le invertirá 40.2 millones de pesos para instalar la escultura "El Palomar", en mencionada avenida al cruce con Leandro Valle. Sin embargo, el munícipe refirió que el proyecto va mucho más allá.

"Creo que hay una apreciación equivocada de la inversión que se va a hacer. No es comprar una escultura, es la recuperación de un nuevo espacio público para la ciudad. No es solamente el levantar El Palomar del arquitecto Luis Barragán".

Recordó que a la altura de la oficina regional de la CFE, en Alcalde, siempre se planteó la creación de una glorieta de distribución vial que nunca se hizo, por lo que con los trabajos que se llevan actualmente se realizará un nuevo espacio donde habrá una plazoleta, con el distribuidor y un gran espejo de agua, además de la escultura que medirá más de 40 metros.

"No lo podemos calcular por metros de la escultura, porque esto incluye también la creación de un espacio público, de una plaza pública, de un gran espejo de agua, de un distribuidor vial. Todo eso son 40 millones de pesos", reiteró.

Aseguró que lo que distingue a una ciudad son sus monumentos, por lo que todas estas acciones van encaminadas a reconocer a los grandes arquitectos de la ciudad, de ahí también las labores de recuperación que llevan del puente Gómez Tremari -en el CUCSH- y que tendrá un costo de 11 millones de pesos.

"Toda la obra del maestro Barragán la tiene una fundación europea, solamente quedó una fuera del patrimonio, y es esta obra que vamos a hacer ahora. Esa obra, originalmente la había planteado para el fraccionamiento del palomar, en los años sesenta, pero esa escultura nunca se hizo. Los propietarios del fraccionamiento, que hoy se llama El Cielo, donaron el proyecto de la escultura que vale millones, para poder tener este gran emblema de la ciudad".

Dijo que si esta escultura hubiera tenido un método constructivo de hace diez años, el costo habría sido el doble, por lo que se buscaron alternativas más ligeras y que la ciudadanía pueda disfrutar. Además, añadió que este espacio podría concluir en enero.

“¿Qué es lo que estamos buscando con este distribuidor vial y peatonal? Que la gente que vaya caminando por Paseo Alcalde pueda atravesar con toda seguridad peatonal hacia la gran escultura del Palomar de Barragán, hacia el gran espejo de agua, que se pueda sentar a leer un libro, a tomarse una foto”, concluyó.