Empezaron en el Parque Rojo, pasaron por palacio de Gobierno y terminaron en el Instituto de Pensiones del Estado de Jalisco, los policías y bomberos que mantienen la propuesta de una jubilación más temprana que el resto de servidores públicos, como una motivación al riesgo de vida que representa su actividad.
El Congreso del Estado tiene la iniciativa en análisis, pero no hay indicios de que la aprueben.
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El plazo actual de los burócratas para jubilarse es de 30 años, ellos proponen que sea a los 25 años de labores. Ofrecen realizar aportaciones voluntarias y cotizar más alto.
El titular del IPEJAL, Héctor Pizano, fue quien los recibió, escuchó y analizará el caso para plantearlo en su momento.