Un estudiante de la Universidad de Guadalajara instaló un observatorio en su casa situada en el municipio de El Salto, Jalisco, y tras las últimas gráficas sobre galaxias lejanas y la luna que ha obtenido, ha llamado la atención de organismos como la NASA.
Emmanuel Delgadillo es egresado del Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías (CUCEI).
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Su pasión por la observación del espacio lo llevó a buscar un hogar en un municipio de la Zona Metropolitana de Guadalajara donde hubiera menos luces y a la vez un cielo claro, limpio, y así armó su espacio al que denominó Observatorio Astronómico de Occidente (OAO).
Comentó que “Que te asignen espacio para un observatorio es muy difícil, y aquí tienes un equipo quizás no tan sofisticado, pero que sí funciona para hacer investigación”.
Con un sinfín de telescopios de distintos tamaños y sin contaminación lumínica de las grandes ciudades para mudarse al municipio de El Salto, convirtió su casa en lugar desde donde observa y toma fotos de galaxias, nebulosas, estrellas y mucho más.
“Empecé hace diez años con la astronomía; me compré un telescopio y me acerqué a la Sociedad Astronómica de Guadalajara para que me enseñaran. Con el observatorio apenas tenemos un año, porque antes iba a acampar con mis cámaras; pero tenerlo todo fijo da más margen para trabajar”, explicó.
El astrofotógrafo, egresado de la carrera en Comunicaciones y Electrónica del CUCEI, expresó que tiene más de un año con el proyecto y sus fotos sobre constelaciones y otros objetos astronómicos que han llamado la atención de organismos internacionales como la NASA.
Yaquelín Montoya, esposa de Emmanuel es aficionada a la astronomía
Detalló que: “Empezamos con fotografía con lente y después nos pasamos a los telescopios. Ahora tenemos telescopios muy difíciles de conseguir, el que nos acaba de llegar es un Takahashi Epsilon, hecho a mano en Japón”.
Para ello ha contado con el respaldo de su esposa Yaquelín Montoya, quien también es aficionada a la astronomía, Emmanuel no sólo eligió El Salto debido a que existe poca contaminación lumínica para observar el cielo, sino porque era más práctico instalar el equipo de observación en un punto fijo para evitar el traslado a campamentos u otros espacios alejados.
Desde ahí le da seguimiento más rápido a eventos astronómicos en caso de que se alerte de la presencia de cometas, asteroides e incluso basura espacial, añadió Emmanuel: “La idea no sólo es tener telescopios para fotos, sino llenar de telescopios aquí arriba y facilitarlos para quienes, por ejemplo, estudian física y no tienen acceso a los grandes observatorios”, aseveró.
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Aseguró que su trabajo ha llamado la atención a agencias internacionales como la NASA y en lo local Universidades y centros de investigación le han pedido apoyo: “me piden que les tome fotos de nebulosas, les pregunto cómo las necesitan y busco el equipo adecuado, tomo las fotos y se las mando”.
No se queda ahí. Emmanuel advierte que tiene pensado acercar a niñas y niños al espacio, por lo que espera construir otro domo e instalar más telescopios y promover campamentos astronómicos.