El Gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, sostuvo durante su discurso de inauguración de la 34 edición de la Feria Internacional el Libro que ha dejado de ser de la Universidad de Guadalajara, “es de todos” y “se ha convertido en una caja de resonancia que nadie puede silenciar”, en clara alusión a las críticas que se dieron en días pasados desde la presidencia de la República.
“Los libros son un hogar, crecemos con ellos, aprendemos de ellos y nos refugiamos en ellos”, dijo el titular del Ejecutivo al citar la trascendencia de los textos, el principal elemento dentro de la FIL. Recordó que a través de la historia, la literatura nos ha demostrado que puede ayudar a distinguir entre teorías totalitarias y formas de pensar que nos libera: “No es casualidad que a través del tiempo y en todas partes, existan personajes que se sientan amenazados por la literatura” y que se hayan dado casos que van desde la censura hasta la quema de libros”.
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Enrique Alfaro comentó que “la realización de la feria nunca estuvo en duda” y felicitó a quienes han trabajado en el cambio de formato, como es el presidente de la FIL, Raúl Padilla López, y la directora de la feria, Marisol Shulz.
“Extrañamos la feria”, dijo, para luego explicar que sin embargo la única forma de hacerla segura era que fuera virtual.
Destacó la celebración de esta edición número 34 de la FIL, cuando la UNESCO ha declarado a Guadalajara la capital del libro en el 2022 y le fue otorgado el premio Princesa de Asturias a la FIL, dijo Alfaro Ramírez, que reconoció en su padre, Enrique Javier Alfaro Anguiano, ex rector de la UdeG e impulsor en sus inicios de esta Feria del libro.
Luego se refirió a quienes han lanzado críticas contra la FIL: “En estos tiempos aciagos en que lo peor de nuestro pasado aparece todos los días muy temprano disfrazado de futuro prometedor, en tiempos en los que los dichos valen más que los datos, en los que la verdad y la mentira se confunden, tiempos en los que el libro, la ciencia y la academia son ignorados, atacados y desplazados por dogmas de fe, estamos obligados a dar una batalla por la defensa de las ideas y de la razón. Eso representa también la Feria Internacional del Libro de Guadalajara: una caja de resonancia que no se puede silenciar”, dijo el mandatario.
Insistió en que “Cuando los liberales que pretenden reconstruir la nación con guías morales, le dicen a la FIL conservadora, lo único que hay que hacer es sonreír ante lo ridículo”.
Por ello, insistió que la FIL fue impulsada por la Universidad de Guadalajara, que la organiza año con año, pero ya “es de todos y para todos, un espacio abierto, una caja de resonancia que no se puede silenciar”, terminó.