Habitantes opositores de la ciclovía de avenida Guadalupe acusaron a la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco y funcionarios de Zapopan, de contubernio y aseguran que el respaldo a la obra llegó después de una reunión a puerta cerrada. Ahora acudirán a la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
Ellos iniciaron la semana manifestándose y anunciando nuevas acciones legales para que regrese la tranquilidad a la zona, puesto que insisten en que la obra les cambió la vida, pasan por ella pocos ciclistas, pero en cambio se redujo un carril, aumentó el tráfico y también la contaminación.
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Desde el cruce de las avenidas Guadalupe y Rafael Sanzio, Ricardo Oliveras dio a conocer que “El día 28 de mayo acudieron Nancy Castañeda, Patricia Fregoso, Jesús Carlos Soto Morfín a una reunión a puerta cerrada donde los quejosos no fuimos invitados”.
Aida Sierra por su parte evidenció lo que viven a diario: “se para un camión, se para el tráfico, se descompone un carro, un caos total. Ha habido ocasiones que está parado todo el tráfico, viene una ambulancia, no puede pasar”.
Aseguraron que la encuesta hecha por el gobierno de Zapopan a 300 personas sobre la entonces ciclovía emergente de avenida Guadalupe, 70 de ellas ni siquiera vivían en la zona y desde ahí se dio una cadena de irregularidades para impulsar la obra.
Los habitantes de la zona que han enfrentado a la autoridad y que en la CEDHJ no encontraron la respuesta requerida, ahora aseguran que llevarán el tema a la propia sede de la Comisión Nacional de Derechos Humanos para presentar una nueva queja.