Consumir ácido fólico antes y durante el embarazo, realizar chequeos médicos mensuales y realizar una cirugía en el útero puede prevenir y detectar a tiempo malformaciones como espina bífida e hidrocefalia.
Especialistas del Hospital Civil de Guadalajara “Fray Antonio Alcalde” y “Dr. Juan I. Menchaca”, informan que desde el primer trimestre del embarazo es posible detectar la espina bífida. Con el fin de disminuir riesgos y secuelas se puede realizar una operación in útero.
Indicaron que al detectar a los pacientes en el primer trimestre del embarazo y realizar la intervención quirúrgica antes del nacimiento, el paciente puede tener una buena y larga calidad de vida, manteniendo los chequeos médicos durante toda su vida.
David Alejandro Martínez Ceccopieri, jefe del Servicio de Cirugía y Terapia Fetal del Hospital Civil de Guadalajara Dr. Juan I. Menchaca, mencionó “Se recomienda que la futura madre comience a tomar ácido fólico antes de quedar embarazada. Además, hay que enfatizar que los síntomas en los fetos comienzan a notarse durante los primeros meses, por lo que una detección temprana podría asegurar una vida plena en los pacientes”.
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Para conmemorar el Día Mundial de la Espina Bífida e Hidrocefalia -25 de octubre- con el tema “Juntos cerrando brechas”, médicos del HCG llaman a la prevención, a identificar factores de riesgo y calidad de vida del paciente.
El encargado de la Clínica de Tumores Cerebrales y Malformaciones Congénitas de la Columna Vertebral, Luis Ángel Arredondo Navarro del HCG Fray Antonio Alcalde, indicó que de cada 100 mil recién nacidos, 143 nacen con esta malformación.
Sobre las secuelas que presentan los pacientes son: problemas renales, de movilidad, sexuales e intestinales.
La espina bífida es un defecto congénito del tubo neural, ocurre cuando la columna vertebral y la médula espinal no se desarrollan de manera correcta durante el embarazo, puede afectar la movilidad. Estos pacientes tienen mayor riesgo de tener hidrocefalia, señalaron los expertos.
Mientras tanto, la hidrocefalia se presenta en una de cada mil personas con una tasa de mortalidad de 50 a 60 por ciento, quienes sobreviven tienen secuelas cognitivas como discapacidad intelectual, física y neurológica.
Para prevenir estas malformaciones los expertos aseguraron que los chequeos constantes durante el embarazo son cruciales para una detección temprana, además de consumir suplementos como el ácido fólico, incluso antes de la concepción.
El HCG, asociaciones civiles y el DIF ofrece atención multidisciplinaria de distintas áreas médicas como pediatría, psicología, ginecología, entre otras, para prevenir, detectar, operar y dar seguimiento a los pacientes con el fin de garantizarles una vida plena.
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