Instituto Miguel Agustín Pro: Educación de calidad con gran calidez

56 años de experiencia que lo avalan y distingue en formación académica, social, humana y espiritual

Rosario Bareño / El Occidental

  · lunes 26 de febrero de 2024

IMAP, 56 años de experiencia en formación académica y social. Foto. Archivo / El Occidental

Al Instituto Miguel Agustín Pro, con 56 años de experiencia en la formación académica, espiritual, social y humana de sus alumnos, le distingue su programa sustentado en los valores éticos, morales y religiosos que les prepara para que cuenten con las herramientas necesarias para adaptarse a las exigencias de nuestra sociedad, actual y futura, como personas íntegras y competitivas.

Fundado en 1967 con el impulso del presbítero Carlos de Jesús Félix Díaz y bajo la razón social de “Instituto Zacatecas A. C.”, ha tomado el nombre de Instituto Miguel Agustín Pro en honor a la vida y obra del mártir mexicano, zacatecano y guadalupense, el beato José Ramón Miguel Agustín Pro Juárez, de quien se retoman sus valores de reciedumbre cristiana, de trabajo, tenacidad y alegre fidelidad a los principios más altos de la formación humana, mismos que se buscan imprimir en los alumnos.

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Para lograr este propósito, el IMAP cuenta con una planta docente conformada por personas profesionales y comprometidas con la enseñanza, con los principios y valores del Instituto y altamente capacitados en su área, para brindar así una educación de calidad con calidez.

Es por ello que la impartición de clases en el día a día está asegurado desde el inicio hasta el final del ciclo escolar, además de que, para un mejor desarrollo de las asignaturas, todas las aulas están equipadas con proyector y conexión a internet y los docentes de las áreas de ciencias cuentan con laboratorios de Biología, Química y Física.

Además de los servicios de biblioteca, capilla, teatro, centro de cómputo, enfermería y cafetería, el Instituto cuenta con un departamento psicopedagógico en donde se brinda atención breve a los alumnos que la requieran, a través de la evaluación de sus habilidades emocionales, sociales y/o académicas, del acompañamiento emocional y/o académico breve para brindar herramientas básicas para la adaptación escolar y, de ser necesario, la canalización a otras instancias.