La directora del Hogar Cabañas, Elizabeth González Gutiérrez no puede con un niño de 11 años, a quien considera “un menor con problemas fuertes conductuales".
“Nuestros niños son espejo de una sociedad enferma y, muchos de ellos, tienen conductas que no pueden convivir con los otros niños, para algunas personas les parece dramático ¿cómo vas a quitar al niño de su ambiente del Hogar Cabañas y te lo vas a llevar?. Sí, pero me puede matar, violentar de mil maneras a los demás y yo tengo que protegerlos”.
Entérate:
Por su parte, el Procurador de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, Luis Antonio Gómez Hurtado dijo que se abocará a este caso e iniciará la investigación.
Durante la comparecencia ante diputados de la Comisión de Asistencia Social, Familia y Niñez que preside el diputado Hernán Cortés Berumen, la funcionaria acudió junto con el Secretario de Asistencia Social José Miguel Santos Quezada y el Procurador de Protección a Niños, Niñas y Adolescentes para aclarar todo lo referente a presuntos maltratos de menores en el Hogar Cabañas.
Por si no lo viste:
La diputada del PRI, Mariana Fernández Ramírez la cuestionó sobre el caso de este menor y le criticó que con todo el aparato e infraestructura Gubernamental, inclusive en el DIF Jalisco que tienen especialistas, psicólogos, terapeutas que pueden atender a los menores, la directora diga que no puede con un menor de 11 años.
González Gutiérrez, señaló que”son importantes sus derechos, pero hasta la fecha, yo no he encontrado un centro adecuado para canalizar a este pequeñito, que esta chiquito acaba de cumplir 11 años en el mes de noviembre y en ese entonces tenía 10 años. En Hogar Cabañas con esa conducta no es posible tenerlo”.
“No vamos a decir el nombre, pero sí es importante que ustedes sepan que este niño tiene problemas fuertes conductuales, ha entrado a salas de lactantes y maternales con tubos queriendo golpear a los chiquitos, ha tenido conductas inadecuadas que ponen en riesgo a la demás población"
Actualmente, el niño después de haberlo derivado a la Próxima Frontera, (centro que consideró que sí cumplía con el registro adecuado “que me cubre el perfil de ese niño y la edad” donde estuvo 20 días.
Tras una junta interdisciplinaria y, a raíz del seguimiento psicológico donde se observó que el menor no estaba bien tratado, se regresó al Hogar Cabañas.
Actualmente, “el niño está contenido, de hecho ha tenido 2 monitores que renunciaron porque no lo pueden cuidar, es realmente inquieto. Tenemos una idea de los niños tiernos y dulces y necesitamos cuidarlos, vienen de familias violentadas".