El Gobierno de Guadalajara apuesta a convertir su centro histórico en uno de los más visitados del estado, el paseo Fray Antonio Acalde cuenta con numerosas obras que lo hacen atractivo para los miles de turistas que acuden a la zona, desafortunadamente existen espacios que tienen años que no se han intervenido y que no sólo afectan su imagen, sino que pueden representar un riesgo para las personas.
Avenidas importantes que llevan al centro tapatío como Juárez, Federalismo e Hidalgo cuentan con banquetas dañadas por las raíces de árboles, falta de tapas de registros y hoyos formados en el piso por falta de mantenimiento.
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Ramona Pacheco y su familia visitan la perla tapatía desde el Puerto de Veracruz, se dice fascinada por la arquitectura y obras del Paseo Fray Antonio Alcalde pero cuestiona los arreglos de las vialidades de los alrededores pues dice que no están a la par de lo que muestra en otros lados de la ciudad.
"Justamente mi hijo se tropezó con una banqueta levantada, la verdad deberían de hacer arreglos parejos porque aquí está muy bonito, da gusto venir pero forzosamente tienes que pasar por esas calles y ahí sí está muy feo en ciertas zonas", Ramona Pacheco, turista.
Y no sólo los visitantes al centro de Guadalajara se quejan por la omisión de las autoridades, Uriel Ruiz trabaja en la zona y comenta que existen decenas de registros sin tapas o abiertos que son una riesgo para las personas.
"Te encuentras de todo, registros de luz, del cable y los del municipio abiertos por decenas y lo peor tiene meses así, ya de plano las personas les han puesto palos o ramas para que se vean y caiga alguien", apuntó Uriel Ruiz, peatón.
Para evitar el robo de los registros de metal, tanto las autoridades como las empresas privadas han buscado reforzarlos con soleras de metal soldadas pero la falta de mantenimiento a estas han ocasionado que las varillas se levanten o sobresalgan del suelo, volviéndose otro peligro para quien camina por la zona centro de Guadalajara.
"Sí deberían tener más cuidado con eso porque entiendo que lo hagan para que no se las roben pero esas mismas protecciones resultan peligrosas porque se levantan o quedan muy por arriba del nivel del suelo y eso es peligroso, el otro día una señora se tropezó con una de las varillas y se lastimó su mano", aseveró Rosalía Sánchez, peatón.