Luis Octavio Cotero Bernal, ex director del IJCF, solicitó mover el primer tráiler con cadáveres del patio de la institución para acomodar el segundo, pero la orden, quién tiene la facultad y quien sacó el tráiler a diversos municipios de la ZMG, fue la Fiscalía del Estado, pues legalmente de ellos depende el resguardo de los cuerpos, aseguró en rueda de prensa.

“Quien lo ordenó debe ser la Fiscal Central o el Fiscal General; no hay ningún documento (informe del movimiento del tráiler), a mí no tenían que darme ningún documento, ellos son quienes disponen, fue provisional que fueran a dar ahí (IJCF) para ser dictaminados.” explicó.

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En ese sentido, El Occidental cuenta con una copia del documento donde se suscribe que el IJCF apoyará a la Fiscalía General con un espacio para el asentamiento de la caja de refrigeración contratada y pagada por la Fiscalía, donde firman el entonces fiscal general, Eduardo Almaguer, la fiscal central, Marisela Gómez Cobos, el director jurídico del IJCF, y Cotero Bernal.

Incluso, fue la noche del 4 de septiembre, que llegaron dos patrullas para sacar el tráiler cuando solo estaba ya el responsable de seguridad del instituto.

Cotero Bernal no va a emprender acciones legales o de defensa por su despido, pues el gobernador, Aristóteles Sandoval, tiene facultades para separarlo del cargo; pero lamentó no se le hubiera permitido de manera más decorosa presentar licencia y le mandó decir que se acerque a personas más honestas y leales (en referencia a Roberto López).

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“Ya no deben dar más espectáculo, porque no hay justificación (...) esto para mí es una pifia de justificación a la sociedad, … Ya saben quién es y dónde está, el sentido común, y yo creo ofenden a la inteligencia con estos actos”.

Dijo que si nadie dio la autorización pues entonces que levanten una carpeta de robo de cuerpos al chofer del tráiler y los policías que lo custodiaron.

Puntualizó, que tanto la Fiscalía como el IJCF dependen de Secretaría General de Gobierno y su titular (Roberto López) sabía de los requerimientos del instituto en infraestructura y personal, además de que los salarios están dos niveles abajo de lo que corresponde.

Recapituló que desde hace dos años la fiscalía contrató la primera caja del tráiler, hace un mes se contrató el segundo; debe haber aproximadamente 250 cuerpos en las dos cajas, más 144 en los refrigeradores del Instituto, cuando su capacidad es para la mitad.

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Aunque en una fotografía se ven bolsas negras improvisadas y cuerpos apilados en las cajas, él aseguró que eran bolsas especiales, incluso donadas por Cruz Roja y que estaban los cuerpos acomodados para su identificación, por lo que pudieron manipular evidencias para desprestigiar al Instituto que pese a las carencias cuenta con certificación internacional.

Cotero solicitó medidas cautelares a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para salvaguardar su integridad y la de su familia ante el debido proceso.

Los cuerpos, dijo cuentan con perfil genético, huella dactilar, fotografía, todo lo posible para su identificación, pero al no poderse cremar, se tenía la posibilidad de las criptas en Tonalá, como disposición final; pero la obra está parada.