La ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Loretta Ortiz Ahlf, dejó en claro que los ministros no pueden ser electos por voto, ya que sus actos podrían rayar más en lo popular que en sus conocimientos jurídicos. Puso como ejemplo la decisión del integrante de un tribunal en Estados Unidos que sentenció a muerte a un hombre, para el que luego aparecieron pruebas inacusatorias, y dijo que lo hizo porque eso le traería “popularidad”.
Esto fue durante la FIL Pensamiento y en el seminario de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre “El derecho a la información, la importancia de la transparencia en el ejercicio de gobierno”.
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Ahí participaron; Luis María Aguilar Morales, Loretta Ortiz Ahlf, Alberto Pérez Dayán, Ana Margarita Ríos Farjat y todos coincidieron en que no es la medida más viable para elegirlos. El evento fue moderado por Carmen Aristegui y Javier Solórzano.
La discusión se centró en dos grandes temas: Las resoluciones emitidas en el caso del Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (INAI) para evitar la parálisis del organismo y donde el ministro Alberto Pérez Dayán fue contundente al señalar que no se puede permitir que esto se vuelva a repetir en las instituciones e insistió en aplicar de manera tajante la ley de amparo y ordenar la destitución de quienes en su momento incurran en desacato. Aduciendo por supuesto a quienes se negaban a aceptar las resoluciones emitidas.
El otro caso fue relacionado con el tema de la elección de ministros por voto popular. En ese sentido opinó la ministra Loretta Ortiz Ahlf y puso como ejemplo su experiencia con un juez en Texas, Estados Unidos: “....Y entonces uno en particular, que había mandado a la pena de muerte a un mexicano y aparecieron pruebas supervivientes de que no era responsable, en ese momento este yo le pregunté, le dije: ´por qué emitió esa sentencia y fue así clarito, no dijo es que esto me dio más popularidad, es que esto me dio la oportunidad de ascender en mi carrera judicial´.
Eso, insistió, “es lo que no nos podemos permitir, o sea, no podemos los que aspiramos a ser ministros llegar, perdón, por un voto popular”.
Ana Margarita Ríos Farjat por su parte explicó que nunca ha estado de acuerdo con esa medida y le queda claro que el proceso de elección debe de ser de manera diferente, considerando que quienes deben resolver los asuntos jurídicos, no pueden ser electas por su popularidad.
“Jueces y juezas somos sociedad resolviendo problemas” y eso se debe de ponderar, no la popularidad de ellas y ellos. “No es sencillo opinar de una discusión en camino, teniendo una responsabilidad, sin embargo, considero que la sociedad mexicana necesita meditarlo”, agregó Ríos Farjat, quien dejó en claro que ninguna institución está exenta de tener intereses.
No puede un juez resolver a partir de que eso le pudiera dar más votos, reiteró la ministra Ana Margarita Ríos Farjat.
La directora nacional de México Evalúa, Edna Jaime, coincidió con ellos, pero si aclaró que debemos de estar claros de que se necesitan mejores mecanismos de designación y “sí necesitamos mejores estándares, procesos diferentes para que lleguen los perfiles idóneos; estoy de acuerdo con ustedes, pero el mecanismo si necesita mejorarse”.