Felicidad al paladar no decaerá en la Ciudad de los Almuerzos

El establecimiento estuvo en riesgo de desaparecer por la terrible afectación económica que deja la pandemia por Covid-19

Elizabeth Ibal | El Occidental

  · domingo 3 de enero de 2021

Foto: Francisco Rodríguez | El Occidental

La afectación de la pandemia por Covid-19 en el restaurante la Ciudad de los Almuerzos ha sido de consideración, tanto que sus ingresos se desplomaron en un 80 por ciento y de recibir los domingos previo a la contingencia sanitaria a 500 comensales, durante esta sólo acudían 20; sin embargo pese a no tener apoyos gubernamentales los propietarios han hecho todo lo posible por no recortar al personal y seguir operando. Un crédito otorgado para abrir una tercera sucursal que sólo quedó en un sueño, es lo que ha hecho que el negocio siga existiendo.


Ese restaurante familiar, llegó a Zapopan en 2009 con deliciosos platillos como molletes, chilaquiles, huevos al gusto, entre otros acompañados de café caliente recién molido, chocolate y jugos, todo elaborado con la receta de la abuela María Luisa. Con ello rápidamente el establecimiento conquistó a los tapatíos e hizo honor a su slogan: "felicidad en cada paladar".

Todo marchaba bien, hasta la llegada de la pandemia por Covid-19 a Jalisco.

Miguel Ángel Amezcua Rodríguez, director administrativo de la Ciudad de los Almuerzos, recuerda que fue el 18 de marzo cuando tuvieron que cerrar en atención a la primera petición del gobernador Enrique Alfaro Ramírez. A partir de ahí tuvieron que implementar filtros sanitarios en el ingreso del restaurante para contribuir en la prevención de contagios.

"A partir de ahí fue un bajón repentino de ventas. Nosotros vendíamos entre el 10 y el 15 por cierto de lo que ingresó el año anterior, es decir cayeron las ventas como un 85 por ciento lo que fue el cierre de marzo, abril, mayo y a partir de junio, julio y agosto comenzó a subir un poquito", contó Amezcua Rodríguez.


Foto: Francisco Rodríguez | El Occidental


Ante la ausencia de comensales, los propietarios del negocio se vieron en la necesidad de utilizar el dinero de un crédito bancario que tenían presupuestado para aperturar una tercer sucursal.

"Teníamos pensado en 2020 iniciar con nuestra tercer sucursal, de hecho ya estábamos haciendo planes allá en el sur y ese capital fue el que nosotros usamos para subsistir".

Amezcua Rodríguez, recordó que cuando la contingencia comenzaba afectarles de forma económica, los 40 trabajadores con los que cuentan, tuvieron un gesto de solidaridad.

"Platicaron con nosotros para decirnos que comprendían la situación. Ellos solicitaban la autorización por parte de la Dirección para hacer grupos de trabajo, debido a que la afluencia de comensales había bajado (...) y como las propinas habían bajado también mucho y ellos comprendían la situación de la empresa. Se organizaron para que hubiera cuadrillas de asistencia, es decir tres días descansaban y tres asistían, lo que ayudaba a que hubiera menos posibilidades de contagio".

A través de ese sistema laboral también se permitió un ahorro ya que los días descansados se pagaban con valor de salario mínimo.

Para Miguel, ello fue importante, ya que con eso se pusieron en práctica los valores de la compañía y con ese acto solidario nunca se pensó en despidos, ya que la labor de cada uno de los trabajadores es importante para el funcionamiento de la empresa.

Asimismo destacó que hasta ahora ninguno de los empleados se ha contagiado de Covid-19, ni sus familiares cercanos, gracias a las medidas preventivas que han adoptado.

Por su parte, Max Fregoso, gerente de operaciones de ese restaurante destacó que para generar confianza entre los comensales, tuvieron que digitalizar el menú y sanitizar los físicos para ser entregados en bolsas de celofán al igual que los cubiertos. En tanto que al ingreso del restaurante se implementó un filtro sanitario y a los trabajadores se les pidió llevar su uniforme en una mochila, lavarse con frecuencia las manos, uso de cubrebocas y evitar saludarse.


Igualmente para recuperar a los comensales se aplicó un paquete llamado ciento cuarentena a un precio de 140 pesos, el cual consistía en un desayuno completo, mismo que fue del agrado de los clientes, lo cual permitió un ahorro de insumos.

Ante la situación, que vive la empresa solicitaron también dos créditos, uno estatal y otro federal, pero ninguno fue otorgado, continúan aplicando estrategias para poder continuar operando.

Los números expresan la magnitud del daño:

80% cayeron los ingresos al inicio de la pandemia

90% bajó la asistencia de comensales

90% de afluencia de comensales actualmente

Conoce más...

500 comensales recibían los domingos antes de la pandemia, tiempo después sólo llegaban veinte.

Con 40 empleados cuenta el negocio en sus dos sucursales en Zona Metropolitana

1 mes de renta les fue condonado en las dos sucursales por la pandemia.