Cuatro semáforos peatonales por cada 100 que existen y zonas exclusivas para el auto, donde el peatón no cabe, caracterizan la infraestructura de la Zona Metropolitana de Guadalajara que a pesar de todos los esfuerzos sigue siendo poco accesible para quienes caminamos por sus calles y en ocasiones hasta mortal. En consecuencia, durante los últimos cuatro años hay un promedio de 394 personas accidentadas por año en la capital de Jalisco y aunque hay una tendencia a la baja, lo cierto es que el 80 por ciento de ellas quedan heridas y el 20 por ciento fallecen principalmente por atropellamiento, de acuerdo a estudio del Instituto de Información, Estadística y Geográfica de Jalisco (IIEGJ).
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BANQUETAS ¿PARA EL PEATÓN?
Hay calles y avenidas que resultan imposibles para el peatón, reconocen colectivos y la propia autoridad vial. Fueron creadas así hace muchos años y definitivamente en ellas el automóvil es el rey. Dentro de la ZMG en avenidas como Lázaro Cárdenas y Periférico la velocidad máxima es de 80 kilómetros y es por ello que se instalaron puentes peatonales que como ha demostrado en algunos casos las personas no los usan y resultan lesionadas o en algunos casos mueren prácticamente debajo de ellos o a unos metros.
La carretera que sale de Guadalajara hacia Chapala es otra de esas zonas cero para el peatón. Sin embargo hay banquetas sí, leyó bien, banquetas que resultan insuficientes y hasta riesgosas para el mismo peatón. De por sí son escasas, muchas de ellas además tienen desperfectos, son angostas apenas cabe una persona y en algunos de sus puntos obliga al peatón a bajarse de ellas; tienen hoyos, pasan frente a cocheras o literalmente están destruidas por las raíces de los árboles.
Y aunque los gobiernos municipales han tratado de hacer de las banquetas un paso digno, los avances no se reflejan y por ejemplo Guadalajara alcanza un 90.7 por ciento, pero de ahí en adelante caen rotundamente. En segundo lugar está Zapotlán el Grande con 79.6 por ciento y Tepatitlán de Morelos con 73.6 por ciento, respectivamente.
Zapopan por ejemplo, aún cuando es el municipio que tiene el mayor número de zonas residenciales, aparece en el lugar número 9 y es porque su disponibilidad de banquetas apenas llega al 63.,8 por ciento. Tlaquepaque, en el lugar número diez, con 62.1; en el lugar 14 Tlajomulco con 59.43 por ciento y en el lugar número 15 Tonalá con 56.47 por ciento. Incluso Puerto Vallarta, a pesar de ser un centro turístico, tiene el 51.,23 por ciento de sus vialidades con banquetas. Nada más.
La historia se repite con los semáforos peatonales que permiten a las personas decidir libremente cuando quieren pasar y que les da mayor seguridad en el caso de los cruce-ros mixtos donde conviven con autos. Guadalajara tiene 4.69 por ciento, es decir cuatro de cada 100 semáforos.
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