Primero un incendio los dejó prácticamente quebrados, ahora algunos locatarios del Mercado San Juan de dios pasaron de la euforia por la entrega de locales renovados y “más seguros” a preocuparse ya que tienen fugas, filtraciones que parecen cascadas y hasta fuentes en los drenajes con lluvias intensas como las de esta semana.
Esta situación tiene preocupados a los locatarios afectados, ya que así no pueden hacer las adecuaciones que le faltan al local para poder instalarse ya que ellos venden productos perecederos y comida “ni modo que la gente esté aquí comiendo y la gotera encima de ellos” señaló uno de los locatarios afectados.
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Todos los que pasan por esa zona consideran que la empresa que trabajó en el segundo piso, que fue una diferente al primero, no hizo bien los trabajos y ahora esperan el peritaje que se deberá hacer para saber las causas de esas filtraciones, “ni el administrador se ha dado una vuelta para saber cómo están esos locales.
La situación tiene preocupados a los locatarios afectados, ya que así no pueden hacer las adecuaciones que le faltan al local para poder instalarse. Y mientras uno pasa por ese sitio afectado se puede ver los charcos de agua que se forman, las manchas en las paredes y las cortina y “apenas eso se dio en cuatro días” indica uno de los trabajadores que hace adaptaciones a los locales para que comiencen a operar, “por allá la coladera parecía fuente de tanta agua que aventó hacia arriba durante las lluvias intensas de estos días”.
Ante esta fallas “nos damos cuenta de que Pablo Lemus nos entregó una obra no terminada, todo esto baja el agua desde el segundo piso, tanto por dentro como afuera del local, yo vendo vísceras de res y así no puedo hacer nada, salen detalles que no estaban contemplados, otra falla es que no van a poner piso” se va aquedar con la capa de cemento que se le puso y ni siquiera está a nivel de las coladera y eso va a ser un grave riesgo para la gente porque se puede caer, mencionó Willy.
Pero también hacen falta colocar algunas tapas de las coladeras ya que hasta este día aún permanecen cubiertas con una pieza de metal y madera para que nadie las pueda mover y los ductos se tapen con basura.
Los locatarios piden a las autoridades que no los dejen solos y que intervengan para que esas fallas se arreglen ya que el mercado tiene tuberías viejas y esa puede ser una de las causas de las filtraciones y las empresas no supieron o no las cambiaron desde el segundo piso que es de donde cae agua.
“Los del Ayuntamiento no han venido, los de Obras Públicas no se paran aquí, el trabajo se le dio a ciertas compañías y ellas son las responsables de cada trabajo que les dieron, fui a hablar con el Administrador del mercado y dijo que ya le habían hablado a la compañía que trabajó arriba para hacer el peritaje, pero no sabemos para cuándo”, mencionó el afectado.
Así entre tubos, cables de electricidad colgando, máquinas de soldar, esmeriladoras que emiten chispas al cortar metal, con una serie de obstáculos como herramientas y máquinas en los pasillos y algunos chorros de agua que caen la cabeza a quien pase distraído, así se vive en los locales entregados hace poco más de una semana y que anunció como más seguros y funcionales.
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