La Enfermedad Renal Crónica (ERC) en México representa un gran impacto a las familias e instituciones de salud de forma directa e indirecta por los altos costos económicos que representa.
Además, es un padecimiento catastrófico, la única cura es el trasplante de riñón; aunque las terapias sustitutivas: la diálisis y hemodiálisis se pueden utilizar en las etapas previas, son muy costosas y deterioran sobremanera a los pacientes.
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En Jalisco hay cerca de cuatro mil 500 pacientes con afectación renal, uno de los principales problemas de salud a nivel nacional.
Un diagnóstico tardío podría costar el tiempo de vida, un padecimiento que no da síntomas al principio, pero en etapas avanzadas es dramático lo que vive el paciente, describe la directora de enseñanza, evaluación e investigación del Consejo Estatal de Trasplantes de Órganos y Tejidos (CETOT), Araceli Cisneros Villaseñor.
“Los síntomas van a parecer cuando ya la insuficiencia renal demasiado avanzado, cuando ya hay anemia, cansancio, pérdida de peso, hipertensión descontrolada ya es demasiado tarde”.
Actualmente en el país, lamenta que más de 17 mil personas están en espera de un riñón, y en Jalisco cuatro mil 500 pacientes.
El segundo jueves de marzo se conmemora el Día Mundial del Riñón, tiene como objetivo concientizar a la población de vigilar y cuidar los riñones para evitar que se deterioren al grado de necesitar un trasplante.
La Enfermedad Renal Crónica en México representa un gran impacto en las finanzas de las instituciones de salud y en la economía familiar; en 2014, el gasto anual promedio por persona fue de ocho mil 966 dólares en la Secretaría de Salud y más de nueve mil en el IMSS.