“Es lo último, no están tratando muy mal”, así recibieron ejidatarios de El Zapote al presidente Andrés Manuel López Obrador, en el Aeropuerto Internacional de Guadalajara, para una gira de dos días por Jalisco y estados aledaños, donde inaugurará cuarteles de la Guardia Nacional.
Fue la presidenta del ejido, Evangelina Vega Pedroza, la que lo abordó al descender del vuelo que lo trajo de la Ciudad de México y mientras caminaba hacia su camioneta, le entregó el escrito donde piden que se acelere el pago de la justa indemnización por las 306 hectáreas que por decreto presidencial les expropiaron para instalar ahí el Aeropuerto Internacional de Guadalajara.
“Me lo llevo”, respondió el mandatario.
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¿Cuándo nos vemos?, yo soy la presidenta. Tenemos cita el próximo jueves con el maestro Ricardo Peralta, en la Subsecretaria de Gobernación. “Échenos la mano, es lo último, nos están tratando muy mal, le pido de favor. Somos los dueños de aquí y ya nos corrieron, que somos un peligro, mire lo que somos, dueños legítimos”. Los ejidatarios fueron desalojados por personal de la Guardia Nacional.
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López Obrador les insistió en que “si tienen la cita, véanla” y les prometió “yo les voy a ayudar”.
Los ejidatarios, que pese al tumulto pudieron entregar el documento, se retiraron con la esperanza de que el mandatario intervenga y se les cubra lo adeudado, pero además reconocido ya por un Tribunal Agrario.
