En las calles de Jalisco, la comunidad de la diversidad sexual vive una serie de obstáculos que impiden su desarrollo, libertad y derechos humanos.
Tras largas luchas para reconocer sus derechos, sigue siendo un campo de disputa; las nuevas generaciones viven la mayor homofobia y violencia antes vista: acoso, violencia en su diferentes tipos, secuestros, desapariciones, asesinatos, exclusión y prohibición para ejercer su derecho a la legalidad jurídica e identidad.
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En Jalisco, la discriminación es un delito y cada 24 horas las personas LGBTIQ son agredidas por su orientación sexual.
Ellas tienen ojos grandes, de piel canela y cabellera larga. Debajo del labial rojo y de su sonrisa tratan de sopesar los retos que enfrentan día a día por ser mujeres trans: discriminación laboral, un sistema de salud que impide su atención integral; el educativo, las cuestiona y la justicia, le niega el acceso a una vida libre sin violencia.
A sus 19 años, Oly González de ojos grandes, detrás de sus lentes negros hace un escaneo de lo que ha vivido como mujer trans: “Presento muchos problemas de discriminación dentro de la bolsa laboral, no siempre contamos con los recursos o con las amplitudes que cuentan las personas heteronormadas”.
La joven trans cada mañana despiertan con miedo ante una sociedad que las invisibilizada y las agrede: “Hemos avanzado mucho a lo largo de los años, pero no hemos hecho lo suficiente, seguimos sin servicio para el tratamiento hormonal dentro del Seguro Social o establecimientos de salud pública, somos discriminadas en los servicios de urgencias. Es muy triste despertar cada mañana y el no saber qué va a pasar”.
De cabellera larga y de tono morado, Elizabeth Vargas de 27 años cada vez que acude a solicitar trabajo, cuestionan su comportamiento, sin analizar sus aptitudes y actitudes para desempeñarse de una forma profesional.
“Somos objeto de burla, piensa que por ser una persona trans no sabes comportarte ante la sociedad. Vas a una entrevista de trabajo y lo primero que te dice la de recursos humanos es ‘pero te comportas’ eso es algo que sale sobrando”.
En el ámbito educativo, Ely ha sido discriminada, después de mostrar sus documentos con nombre de chico, es objeto de burla por parte del profesorado.
“Los mismos profesores te recalcan en cada momento tu sexo y tu nombre de nacimiento”. El cambio de identidad de género es uno de los grandes retos para ellas. Hace unos días, Ely fue agredida físicamente en el Parque de la Revolución conocido como Parque rojo: “Yo iba saliendo en una junta y paso me golpean a escasos metros me encuentro a unos policías les comentó y me dicen que eso me busco porque ando en tacones y vestido, así ando diario”.
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Denuncia que, los elementos de seguridad municipal en vez de brindarle protección por ser víctima de violencia la humillaron y victimizaron. “Me trataron como prostituta por como andaba vestida, por ser trans, yo no me dedico a eso, estudió la preparatoria, colaboró en una fundación y trabajo.
Hay una total discriminación hacia nosotras en todo”. Oly y Ely piden vivir en un país libre de violencia: “Nosotras estamos muy inseguras por este caso de las desapariciones, no solamente la sufren las mujeres, los hombres, también la comunidad trans, sufrimos mucha violencia de género”.
Para el coordinador de incidencia política de Guadalajara, Manuel Cobián, la principal problemática que viven las personas LGTTTQ y más, es el estigma y la discriminación institucional, social y del sistema judicial.
“Por parte de los ministerios públicos, de actuarios, de las personas que están al frente de este Poder Judicial (…) tenemos personas desaparecidas, sufrimos violencia, sufrimos muchísimas cosas, es alarmante, hay muchas personas que no denuncian y hay amenazas a la familia”.
En los municipios de Jalisco se presentan dos fenómenos: desaparición de personas de la diversidad sexual y las llamadas terapias de conversión: “sobre todo en Tepatitlán, Chapala y Atotonilco el Alto, tenemos conocimiento de alrededor de cuatro o cinco personas por municipio al mes”.
Aunque la Organización Mundial de la Salud excluyó la homosexualidad de laClasificación Internacional de Enfermedades, y en Jalisco se prohibió las terapias de conversión sigue siendo una práctica.
Normatividad LGBT
Pero ¿cómo está el paquete normativo de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex en Jalisco de protección a sus derechos? El responsable del Grupo de Trabajo Especializado en Materia de Diversidad Sexual de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos en Jalisco (CEDHJ), Benjamín González Mauricio, indicó que, aunque hay avances es necesario vincular cuales han sido las brechas para equilibrar la cláusula de igualdad y no discriminación.
Así como garantizar por parte de las instancias de gobierno estatal y municipal una atención libre de violencia y erradicar los discursos de odio “el cual tiene como punto final a la persecución de crímenes de odio”.
En el andamiaje normativo, queda en la cuerda floja la progresividad al restringir a la población infantil de sus derechos.
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En el Código Civil, el matrimonio igualitario está regulado; en el Código Penal, está erradicado y sancionado las terapias de conversión y en la Ley del Registro Civil, el derecho a la identidad de género está regulado.
Sin embargo, hubo un “blindaje” en este derecho para la infancia trans, quienes a los 18 años deberán reclamar, pese al decreto del Gobierno de Jalisco de garantizar en un sentido amplio y generalizado a este sector.
“En el cual solo se garantiza el derecho de la identidad autopercibida en población trans hasta que cumplan la mayoría de edad (..) hay un detrimento de progresividad de los derechos humanos de la niñez sobre todo de la infancia trans, no obstante, a lo anterior de los derechos adquiridos”.
En la agenda de la diversidad sexual, quedan pendiente: el derecho a la autodeterminación de las personas intersex, el andamiaje interinstitucional por parte de los derechos laborales y de seguridad social de la población LGBTIQ y más, homologar y acreditar protocolos de atención y de intervención libres de violencia, homofobia y erradicar los discursos de odio. Desde el 2017 a la fecha, la CEDH ha emitido al menos seis recomendaciones temáticas: recientemente, se pide configurar como “delito autónomo y penal” los crímenes de odio dentro del Código Penal.
Se tiene un registro de al menos cuatro crímenes de odio en la entidad. “Otro tipo de investigaciones que hemos investigado son las relativas a la persecución de asesinatos a población de LGBTQ y más conocidos como los crímenes de odio, aun en el estado de Jalisco no son reconocidos como derechos autónomos sino sólo una agravante de homicidio calificado”.
En este trayecto de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de las personas de la diversidad sexual y de una fuente normativa hace falta homologar los criterios institucionales del Estado y sus municipios y emprender una campaña social contra la homofobia.
