Fue anunciada con bombos y platillos como la herramienta para poder identificar los cuerpos de las personas fallecidas bajo resguardo del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF), sin embargo las integrantes de la asociación Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos (Fundej), desconocen la existencia de dicho registro y aseguran que no se tiene nada.
Guadalupe Aguilar, presidenta de Fundej y mamá de José Luis Arana Aguilar, quien desapareció desde el 17 de enero del 2011, enfatizó que no saben nada de ese registro, que no se los han hecho saber y si existiera las identificaciones y entregas de cuerpos serían más ágiles y el instituto no tendría tantos cadáveres en sus instalaciones.
“No sé cuándo hicieron ese anuncio de base de datos, yo lo único que sé es que no existe una base de datos, porque si existiera, ya nos hubieran entregado a muchos”, aseguró.
En dicha base se daría a conocer edad aproximada de la persona (si es que se puede determinar), tipo de ropa que llevaba puesta (cuando así fuera al momento de encontrar el cuerpo), tipos de tatuajes, marcas, operaciones, calzado, entre otros aspectos.
Pero de toda esa información, las integrantes de Fundej desconocen su existencia y Guadalupe Aguilar asegura que “no existe esa base de datos y por eso se tardan más las confrontas, es decir, la identificación del cuerpo cuando se encuentra en partes.
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Mientras tanto, instalaron un módulo de información que permanece en el exterior del IJCF y ahí sin importar el frío de la madrugada, la falta de sanitarios, regaderas, sin cocinas para poder preparar alimentos, así se pasan día y noche por turnos para apoyar a quienes buscan un familiar y que tampoco conocen que se tiene ese sitio habilitado por las autoridades para “agilizar” trámites de identificación.
Mientras que integrantes de la comunidad de personas transexuales exigieron al Gobierno del Estado que en los protocolos de identificación de los cuerpos se apliquen los temas de género ya que muchos de las personas que son transexuales son inhumados sin identificar.
Los amigos de quien se hacía llamar como “Susana” se manifestaron en el Parque Revolución y ante el hecho de que su amiga iba a ser inhumada como una persona sin ser identificada, exigieron que tanto en el IJCF y en los ministerios públicos que investigan estos homicidios “agoten los actos de investigación” ya que ese tipo de situaciones hace que las familias busquen de forma indefinida a sus familiares.
“Una vez más nos damos cuenta de que no podemos confiar en las instituciones del Estado. Cumplan con sus obligaciones y constatamos que son las familias, colectivos y sociedad civil los que tenemos que lidiar con este tipo de casos y los que hacemos el trabajo de las instituciones”.
Este año las autoridades estatales dieron a conocer que inhumaron los cuerpos de 35 personas sin ser identificadas y en lo que va de la administración 579 personas están en esa condición, lo cual les preocupa aún más.
Al hacer una búsqueda de la página oficial del IJCF en diversas ocasiones y en diversos equipos, se mostró que estaba fuera de servicio, incluido el micrositio denominado “Personas Fallecidas Sin Identificar (PFSI)", en donde se suben los datos con los que se cuentan como probable nombre, edad aproximada en caso de ser posible determinarla, señas particulares, tatuajes y tipo de ropa.
Sin embargo, el PFSI tras varios intentos en repetidas ocasiones también mostraba una leyenda de que no estaba disponible y no se tenía idea desde cuándo estaba así, pero este sábado ya funcionaba de nuevo toda la página.