La invitación que hizo el gobernador Enrique Alfaro Ramírez a las autoridades de la Universidad de Guadalajara (UdeG) para reiniciar el diálogo institucional y respetuoso, no es la puerta de entrada para buscar el control absoluto de la institución.

“Lo digo de manera tajante, es un principio para mí de vida, no es ni siquiera político, mi padre no me dejó hacer ni siquiera político en la prepa porque desde entonces me dejó claro que si yo quería dedicarme a la política, tenía que ser fuera de la universidad, mi padre fue político universitario yo no y no tengo ningún interés en la vida interna de la universidad al contrario, respeto el principio de autonomía y creo que la comunidad universitaria tiene que hacer un ejercicio serio de transformación, pero será, la comunidad universitaria, la que haga ese proceso no el Gobernador de Jalisco “, mencionó.

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En su carta abierta que publicó en redes sociales a través de la cual invitaba a las autoridades universitarias para retomar el diálogo respetuoso, no mencionó nada sobre el fallecimiento de Raül Padilla, presidente de la Feria Internacional del Libro (FIL), acabando la inauguración de Talent Land sólo mencionó que “en efecto fue un suceso lamentable”.

Reiteró el contenido de la carta y sobre todo su postura de que la institución educativa se concentre en sus tareas fundamentales y si el diálogo se centra en esos términos se podrá retomar, aún no tiene fecha para hacerlo y al rector Ricardo Villanueva lo recibió el domingo pasado en Casa Jalisco en el marco de los hechos luctuosos para la UdeG y no se habló sobre este tema.

Pero más allá de los hechos del 2 de abril pasado, Alfaro Ramírez espera que el rector “entienda esta oportunidad para que se puedan construir condiciones de diálogo respetuoso y serio” en los próximos días se podrían reunir pero será hasta pasando las vacaciones.

Es por eso que una vez que se regrese de vacaciones y en asado el duelo universitario espera que se tenga la madurez necesaria para comprender que se tiene que replantear de fondo muchas cosas dentro de la universidad pero eso lo deben definir desde adentro.

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Lo que no está de acuerdo es que este diálogo se quiera hacer con presiones de cualquier tipo como son las marchas y sólo así destrabar muchos temas y explicarles cómo ha fluido el presupuesto para la UdeG en este año con obras de infraestructura como es el centro universitario de Tlaquepaque, el de Tlajomulco, preparatorias entre otras.