Denuncian en redes sociales, abuso por parte de policías y agentes de la Fiscalía del estado

En diferentes plataformas los presuntos afectados dieron su testimonio sobre lo ocurrido el día viernes en las manifestaciones

Óscar Beltrán I El Occidental 

  · sábado 6 de junio de 2020

Foto: Antonio Miramontes

A través de sus cuentas de redes sociales, han comenzado a salir a la luz los caos de varios manifestantes que fueron detenidos este viernes en la concentración que hicieron en los alrededores de la Fiscalía del Estado, en donde han consignado que muchos fueron detenidos arbitrariamente y soltados en zonas lejanas, además de que fueron golpeados y amedrentados por agentes de la Fiscalía de Jalisco.

Entérate:

Uno de los testimonios es el de Inés Michel, quien dijo que iba caminando rumbo a la Fiscalía, cuando fue detenida sin motivo alguno, junto a su hermana menor de edad y su novio.

“Una cuadra y media antes de llegar, una camioneta que no era de la policía, se bajaron dos sujetos, tampoco identificados como policías, sin mediar palabras, nos arrebataron cartulinas que llevábamos, empezaron a golpear a mi pareja, le pidieron que se arrodillara”, relató.

“Ellos no hablaban, se fueron directo a los golpes, a mi hermana le arrebataron el teléfono, alcancé a hacer una llamada. Había mucha gente, específicamente de una empresa que estaba justo donde nos estaban deteniendo, pedimos ayuda y no nos ayudaron. Le estaban dando de toletazos a Víctor, hablando con groserías, yo traté de hacer un diálogo que no funcionó, pues tenían la consigna de detener a cualquier persona en la zona. Nos subieron a la patrulla a los tres y nos quitaron las cosas”.

Después, comentó que llegaron agentes de la policía, y es ahí donde se los llevaron a una jaula, en donde asegura había cerca de 50 personas detenidas, todos ellos amenazados y sin haber tenido una detención en forma.

“Pidieron refuerzos, llegaron otras camionetas, unos elementos de la policía, mujeres y hombres. Las mujeres fueron agresivas con nosotras, no nos golpeaban, nos pedían que nos quitáramos. Recibí golpes por tratar de proteger a Víctor. Nos llevaron a la Fiscalía y nos mandaron a una jaula y había otras 30 personas detenidas ahí, había otros 20 en otra. No fue una detención, en ningún momento nos pidieron identificaciones, ni nuestros nombres, no fue un proceso, nos metieron y nos echaron en cara que si sabíamos que había pasado el jueves. Dijeron que habían encontrado bombas y cuchillos y que si eran nuestras, nunca vi nada, más que unas tijeras que preguntaban de quién era. El jefe de la policía nos dijo que no nos quería volver a nunca, nos dijeron que ellos son los buenos, que dan la vida por nosotros, que porque los atacamos y quemaron a un agente”.

Chécalo:

Tras cerca de 40 minutos detenidos, comenzaron a sacarlos, y ella cuenta que fue subida a una camioneta rotulada de una panadería, eran 12 mujeres las que subieron, e iban con dos mujeres policías y dos policías, quienes se fueron burlando de ellas y amenazando con golpearlas si levantaban la cabeza. Al final las fueron dejando en lugares lejanos para que les costara trabajo volver a casa. A ella la dejaron en Toluqilla, a su hermana por el cerro del Cuatro y a su novia en Las Pintas.

Muchos de los que fueron despojados de sus celulares, cuentan que les exigieron desbloquearlos y se los estuvieron revisando, desde mensajes, redes sociales y llamadas realizadas. Y contó que a los que se los quitaron, se los van a regresar este sábado y les dijeron que fueran por ellos, pero el miedo de ir prevalece.

Otro caso desconcertante es el de André Michel, quienes junto a un compañero, fueron detenidos y ellos ni siquiera iban a la manifestación, fueron detenidos en la parada del camión.

“Me hicieron desbloquear mi celular y accedieron a mis perfiles de redes sociales, por lo que las voy a cerrar. No hicimos nada, nos levantaron por estar esperando el camión, golpearon a muchos, muchas mujeres jóvenes en shock, a muchos no les regresaron sus celulares y artículos personales. Nunca nos imaginamos que iba a suceder algo así y ojalá que todos se den cuentan en el país que vivimos. No debería sentirme afortunado por regresar a casa hoy, pero lo soy por no haberme convertido en una cifra más de desaparecidos por el gobierno