El ejemplo de un comerciante vecino de El Salto, que hoy con recibo en mano se declara insolvente para pagar el agua, pone en evidencia lo que pudiera ser un aumento indiscriminado en el municipio de El Salto al servicio que lleva como nombre Servicio de Agua Potable y Alcantarillado, más aún cuando se trata de un municipio donde la escasez de agua es constante y la que les llega es de mala calidad.
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Y es que hoy saben que en el mes de diciembre pasado el ayuntamiento “se las aplicó” y decretó el aumento del agua. Hay que recordar que El Salto, municipio conurbado de la Zona Metropolitana, no se encuentra dentro del Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA).
Sólo a comerciantes
Los aumentos se concentran sobre los comerciantes, sin importar edad o condición económica, mucho menos aquellos casos donde esas personas apenas sobreviven con lo que les deja su negocio.
EL OCCIDENTAL tiene en sus manos el recibo 202945 emitido por el Gobierno municipal, donde hace un año, a quien ahora le pretenden hacer exagerado cobro, el 15 de febrero del 2018 pagó entonces la suma de mil 257.20 pesos.
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Por esa cantidad cubrió infraestructura, anticipo de agua potable y de aguas negras. Apenas le hicieron un descuento de 174 pesos con 72 centavos.
“Quiero compartir con ustedes este ejemplo de imposición del Gobierno de El Salto”
Sin embargo, ahora, sin hacer una consulta pública con los saltenses o al menos informarles, el cabildo municipal acordó aumentar el costo del servicio de agua "potable" a todos los comercios.
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De cobrarle mil 257 pesos, ahora le están cobrando la cantidad de ocho mil 553.83 pesos, es decir, más del 800% de aumento.
El Salto ha resuelto ingresar a sus arcas, vía esta medida, la suma de 35 millones 297 mil 631.20 pesos.
Se quejan los comerciantes, como en este caso, que además del aumento exagerado, están condicionando el refrendo de la licencia comercial a que antes realicen el pago por adelantado del predial y del servicio de agua "potable"
Uno de los ofendidos, que prefirió guardar su nombre por temor a represalias, comentó que: “Con esta medida, lo único que van a lograr es obligar a los comerciantes a cerrar sus puertas. Dejando sin trabajo a muchas personas”.
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El número de quejas crece por lo que aseguran que son incrementos desproporcionados, donde “hoy pareciera que a los saltenses nos quieren cobrar el agua que se contamina y desperdicia en la zona, cuando los responsables de ello son los habitantes de todo el resto de la Zona Metropolitana”, denunció otro de los comerciantes afectados por estos incrementos.
