La Diputada Federal Mónica Almeida, solicitó a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) implemente una tarifa eléctrica especial a las personas con carencias sociales en su población, en hogares cuyos propietarios tengan ingresos menores a 5 Unidad de Medida y Actualización (UMA que tiene un valor de 86.88 pesos), como alternativa de apoyo a grupos vulnerables afectados por la pandemia del Covid-19.
Exhortó a que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la Secretaría de Economía, y el Servicio de Administración Tributaria condonen el equivalente al 50% del impuesto sobre la renta (ISR), además de integrar un fondo emergente de apoyo directo a las pequeñas y medianas empresas que les permita cumplir con sus obligaciones laborales, así como la implementación de estrategias que impulse y eleve la competitividad en los sectores económicos prioritarios y la implementación de esquemas de financiamiento para productores del campo.
“Salvar a las Pymes es rescatar nuestra economía, pues ellas generan el 72% de la fuerza laboral, por lo cual la condonación de sus impuestos les permitirá mantener a sus empleados, y el fondo creado a partir de los subejercicios les dará un mayor alivio para seguir siendo uno de los pilares de nuestra economía cabe destacar que esto será únicamente durante el periodo de esta contingencia sanitaria”, manifestó.
Chécalo:
Indicó que es importante se cumplan las medidas de Seguridad Sanitarias emitidas por el Consejo de Salubridad General, en torno a la Pandemia del Covid-19, en la entrega de la pensión para el bienestar de las personas adultas mayores, así como en la dispersión y entrega de los diferentes programas para el desarrollo social que benefician a la población en México.
“Estas medidas que propongo a través de los puntos de acuerdo ayudarán a que más mexicanos tengan la oportunidad de quedarse en casa y evitar ser contagiados o ser portadores de la nueva sepa, y así mitigar los estragos de esta enfermedad en nuestra nación”, finalizó.
La Secretaría de Salud, el pasado 24 de marzo, emitió la ampliación de medidas de prevención de la Jornada de la Sana Distancia, entre las que se encuentra: “Suspender temporalmente las actividades de los sectores público, social y privado que involucren la concentración física, tránsito o desplazamiento de personas”, sin duda esta medida debe tomarse con bastante seriedad ante el panorama adverso que genera el Covid-19, sin embargo existe una gran cantidad de personas que simplemente no pueden parar, es decir, no se puede pedir a la población que prioricen una medida de prevención sobre las necesidades básicas que tienen las personas.