¿Crees que así como se retiraron los vapeadores del mercado, por decreto deben prohibirse otras sustancias que hacen daño a la salud?
Gabriela Cárdenas, diputada local de Movimiento Ciudadano (MC)
Creo que prohibir no debe ser la primera respuesta, pero de entrada dependiendo de qué tipo de sustancias. Hubo un ejemplo cuando prohibieron el alcohol ¿qué fue lo pasó?, pues se volvió un desastre. Yo creo que en el caso de los vapeadores y en algunas sustancias tenemos que entrarle a la regulación, a generar una política nacional antidrogas y antiadicciones, porque no existe en nuestro país ni siquiera un presupuesto asignado a la Secretaría de Salud para esto. Entonces, dependiendo las sustancias, y en el caso de los vapeadores y alcohol es regularlo para poder tener una política pública que se adapte desde la prevención. El hecho de prohibirlo ahora lo que estamos haciendo es abrir la puerta a que el crimen organizado tome ventaja, a un mercado clandestino, mercado negro. La gente es llamada a usar este dispositivo y difícilmente lo van a migrar.
Yussara Canales González, diputada local de Morena
Estoy totalmente de acuerdo que se hayan prohibido los vapeadores, debido a que considero que era y es bastante dañino para la salud, y el riesgo que tenemos aquí es que los niños están teniendo acceso a ellos, y eso no está bien. Es mucho el riesgo que tenían, incluso se estaban presentando síntomas agudizados de lesión pulmonar debido a los vaporizadores. Es por eso que considero que sí deberían prohibirse otras sustancias, que también son dañinas, tenemos el ejemplo del cigarro y la diferencia creo yo es el tiempo en el que se presentan complicaciones. Por la demanda sería bastante difícil que se prohíban el alcohol como el cigarro, pero considero que por el tema de salud sí deberían de prohibirse, sin embargo creo que sería un tema bastante difícil.
Guillermo Quiroga Madrigal, comerciante de vapeadores
En definitiva deberían de prohibir el consumo del tabaco convencional por todos los químicos que traen, está comprobado que el cigarrillo electrónico o vapeadores son 95% menos dañino que el cigarro, así lo revelan estudios realizados en Europa, en concreto en Inglaterra, incluso en ese país existen tiendas de vapeo en las propias clínicas antitabaco, como una opción para dejar de fumar. Aunque los cigarros electrónicos no hacen combustión, el desconocimiento respecto al vapor que producen es lo que sustenta que se quiera regular de la misma manera que el cigarro, cosa que nada que ver. La nicotina no es cancerígena ni produce infartos una vez disociada del humo de tabaco. Hay 30 años de evidencia epidemiológica que lo demuestran.
Giovanni Zepeda, consumidor de vapers desde hace 5 años
Siento que no va por ahí de prohibir solo los vapeadores, a los que deberían prohibir son a las empresas que fabrican cigarros o que prohíban el alcohol, ya que eso sí causa muchas muertes diarias. ¿Sustancias que hacen daño a la salud? Que se vayan con los refrescos, con la coca cola que es muy dañina. El cigarro para empezar es mucho más dañino que el vaporizador, si en verdad quieren irse en contra de aquello que enferma, que empiecen por lo más grave, pero hasta parece que le quieren dejar el camino libre a las grandes empresas, porque se dice que las tabacaleras pagan para que saquen de la competencia estos productos.
Beatriz Amezcua, ciudadana
Como ex fumadora puedo decir que es un buen paso aunque muy corto si me lo preguntas. Cuando dejé el cigarro pensé en usar los vapeadores pero lo vi inútil, sobre todo porque en casa tengo a dos personas propensas a enfermedades respiratorias y no se sabe qué tan dañinos o no puedan resultar también estos. Ojalá que así como se vio voluntad para vetarlos lo hicieran con los cigarros por ejemplo, pero sabemos que eso no va a pasar ¿no? Las grandes industrias de eso viven y aunque es injusto que la regulación o prohibición aplique para unas cosas y otras no, uno esperaría que se vayan también contra el tabaco, que sea parejo.
Fernando Barragán, Miembro de la Alianza por la Libertad del Vapeo A.C
Ninguna sustancia debería ser prohibida, y menos cuando, en el caso de los vapeadores, está comprobado que son menos dañinos que otros que no se encuentran prohibidos como el tabaco combustible. Es absurdo pensar que el estado debe actuar de figura paternalista y decirnos a los habitantes qué debemos hacer, comer, tomar o utilizar. El estado debe garantizar que existan reglas claras para que los consumidores estén enterados de las consecuencias y contenido de dichos productos y de esta forma el usuario tome su decisión. De medir todas las situaciones con “la misma vara”, el estado tendría derecho a prohibir el consumo del azúcar, del tabaco, del alcohol, etc. Y si es por una sustancia adictiva, terminarían incluso prohibiendo el consumo del café.
