El Hospicio Cabañas cumple 213 años. Resguarda en sus paredes, cúpulas, fachadas y en sus 23 patios, gran parte de la historia de México; fue cuartel de la guerra de Independencia e incluso lugar simbólico del muralista José Clemente Orozco. En sus inicios su fundador el obispo Juan Ruíz de Cabañas lo llamó “Casa de la Caridad y la Misericordia” que después se convirtió en el Hospicio Cabañas que llegó a albergar más de 600 niños y niñas.
Hoy al cumplir 213 años y cambiar su sede de lo que ahora es Museo Cabañas ubicado en Plaza Tapatía al Hogar Cabañas (ubicado en Mariano Otero a un lado de Plaza del Sol) tiene 320 menores que sufrieron violencia física, emocional y sexual.
“Es un hogar de protección no es una guardería”, subrayó su directora en entrevista con EL OCCIDENTAL Rebeca Melgar Chávez, Son niñas, niños y adolescentes que reciben una formación integral en lo académico, deporte, arte, valores, que inclusive 50 de ellos compiten en judo a nivel nacional.
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Habla de que ya no es difícil la adopción para ellos, aunque primero deben ser liberados, esto significa que deben agotarse todas las redes familiares y una vez que se haga se procede a la pérdida de la patria potestad, tras ese paso son de 8 a 12 meses el trámite de adopción.
Sí hay lista de espera para adopciones en el caso de bebés y menores de 2 años. Aunque también están menores de 8, 10 y hasta 18 años que ya están liberados y esperan que los adopten. Cuando comenzó su función de Casa de la Misericordia, tenía como objetivo dar asilo a ancianos, lisiados, enfermos, caminantes pobres y huérfanos.
En 1824 cuando murió su fundador se convirtió en hogar únicamente para niños y niñas. De acuerdo con datos históricos, su capacidad de atención era de 600 niños. El Hospicio Cabañas no solo brindó un techo a las personas desamparadas. También fue usado como cuartel en los tiempos de la Guerra de Independencia. A lo largo de los años fue tomado varias veces por cuestiones políticas, pero en 1857 cuando pasó a ser propiedad de la nación, empezó su etapa más importante como el orfanato más importante de América Latina.
“Antes era para los refugiados de la guerra, para albergar a los niños que sus familias no podían mantenerlos, antes no era un albergue para menores violentados, era para niñas, niños, adolescentes y jóvenes que no tenían el sustento”, dijo Melgar Chávez.
Hoy en día sigue como la casa más especial e importante de Jalisco, porque “tenemos a los niños, niñas y adolescentes del estado, a nosotros nos llegan los chicos de los 125 municipios e inclusive de otros lugares, estados y países, que son separados de sus familias por algún tipo de violencia vivida”, añadió.
La titular del Hogar Cabañas se ha convertido en un hogar de protección, de salvaguardar los derechos de los menores.
”Hogar Cabañas no es una guardería”, manifestó ya que no se trae al infante para cuidarlo solamente, sino aquí se le da toda una formación que consiste en deporte, cultura, la parte académica y darles a conocer una realidad, “que lo viable, que lo bueno no es la violencia, no es que los golpeen, no es que los quemen, no es que los violen, sino es que una persona cuide, proteja y acompañe y dé seguimiento”.
Los menores por lo regular saben de su historia, por lo que se les fomenta que se den cuenta que “necesitamos más paz y más amor”, que no por decisiones de adultos, sin juzgar a los padres, es que ellos están en el Hogar Cabañas.
FOMENTAN VALORES Y DEPORTES COMO EL JUDO
Trabajan todos los días en inculcarles un cambio de mentalidad hacia lo positivo y lo hacen a través del ejemplo que son los trabajadores ya que los voltean a ver y para ellos son su referencia, también con actividades desde el CENDI, preescolar, primaria, secundaria y bachillerato y por las tardes acuden a actividades de arte, deportes, baile, clases de valores y otras que ayudan a desarrollar sus habilidades. Muchos de ellos se empiezan a autoconocer ¿para que soy bueno?, ¿Qué me gusta?,¿Qué me apasiona?,¿qué me motiva?. Por ejemplo 50 menores que han competido en judo en otros estados y a su
vez vienen a Jalisco a competir. Comienzan a fomentar el gusto por un deporte y a darse a cuenta que son buenos a ganar medallas.
CASOS DE ÉXITO
Dijo que tiene varios casos de éxito de jóvenes que han egresado al cumplir su mayoría de edad. Todos los años hay egresos, 1 a 5 cumplen la mayoría de edad se reincorporan a sus familias, o entre los mismos que salen viven juntos. Trabajan y estudian.
Contactaron más de 100 ex residentes que provienen de lo que es el Museo Cabañas y otros del Hogar Cabañas, quienes ya están casados, o están divorciados, trabajan, son abogados, maestros y que han salido adelante y les contaron sus historias de vida a los más chicos ,"yo estuve aquí tantos años y mira me reintegré o me adoptaron según el caso y ahora trabajo aquí".
El Hogar Cabañas se mantiene de lo que le otorga el estado en un 50 por ciento y el resto vía benefactores o de los ingresos que llegan de los 28 pesos por el refrendo vehicular.
Proceso de adopción dura de 8 a 12 meses
Hay que quitarnos la idea de lo difícil para adoptar. "Debemos quitarnos la idea de lo que es difícil. Aquí hay una diferencia entre lo difícil y lo tal cual el protocolo administrativo que debe de llevar, qué es lo tardado, señaló la directora del Hogar Cabañas Rebeca Melgar.
"Sí el niño está liberado ¿Qué quiere decir esto? Todos tienen una familia, el problema fue que hubo violencia en casa, que hubo omisión de cuidados y por ese motivo se abre una carpeta de investigación que llegan al Cabañas y hay que resolverlo, pero no quiere decir que sean totalmente liberados cuando se recibe a los niños, nuestro trabajo es revisar todas las redes familiares que hubiera para hacerse cargo del menor".
El trámite de adopción dura entre 8 a 12 meses una vez que el menor es liberado. Hay lista de espera para los bebés y menores de 2 años. Sin embargo también se tiene a menores de 8 a 10 años y de menos de 18 años que ya están liberados y esperan ser adoptados. Exhortó a la sociedad a ser empáticos con el Cabañas y con los menores.
"Todos estamos involucrados y comprometidos porque ellos una vez que salgan del hogar Cabañas van a ser parte de la sociedad pueden ser nuestro vecinos o novias o novios de nuestros hijos e hijas, necesitamos apoyarlos, sensibilizarlos y tener esta empatía con estos menores, es toda una formación integral lo que reciben los niños".