Comprar una casa es un sueño inimaginable y rentar tampoco es una opción para acceder a una vida más cómoda ya que Zapopan es uno de los municipios con las rentas más caras de las metrópoli llegando hasta los 100 mil pesos, pero su promedio es de más 24 mil pesos.
De acuerdo al titular del Instituto de Información Estadística y Geográfica de Jalisco (IIEG) Augusto Valencia López, la medida del sueldo de los jaliscienses es de 9 mil pesos lo que convierte la posibilidad en sueño frustrado. Salir de la ex villa maicera para conseguir una renta barata no garantiza acceso a los servicios básicos ya que colonias o fraccionamientos con rentas de bajas como en Tlajomulco o El Salto que pese a estar dentro del padrón de predial no garantizan una mejora real en comparación a un asentamiento si de servicios se habla.
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“Mi familia y yo estuvimos viviendo un tiempo en Chulavista (Tlajomulco) pagaba 500 pesos de renta... no le digo que no los podía pagar pero ahí está más feo que aquí; nunca hay agua, las calles están refeas, calles apagadas y se metieron a robar mi casa, entonces la verdad nos regresamos. Aquí tenemos los mismos problemas, pero no pago, es mi casa y tengo fe que vamos a arreglar los papeles para dejarles algo bien a mis hijos” señaló Oscar Valencia, habitante de la colonia Fraternidad de Zapopan.
Ees una carrera interminable
En Zapopan existen instituciones como la Comisión Municipal de Regularización (COMUR) o el Instituto Nacional de Suelo Sustentable (INSUS) que se encargan de brindar certeza jurídica y protección al patrimonio de las personas asentadas en zonas irregulares.
El proceso es minucioso y nada rápido, pero aún así han entregado decenas de títulos de propiedad los cuales se encuentran a la espera de entrar al presupuesto municipal para la dotación de servicios básicos en sus colonias. Los habitantes de la colonia Fraternidad reconocen su realidad, saben que su estatus de ejidales no le permite al municipio destinar recursos para incluirlos en sus paquetes de obras, por lo que al momento abogan a la sensibilidad del edil Juan José Frangie que siempre se ha mostrado consciente en mejorar los entornos del municipio, sobre todo en donde existe la presencia de niñas y niños.
Ellos esperan su apoyo ya que el ejido de Santa Lucía al que pertenecen se encuentra a tan sólo 30 minutos del Centro de Zapopan. Pero todavía muy lejos de recibir servicios y aunque saben que no tendrán la misma suerte de los cientos de inquilinos que se suman día a día, en los grandes edificios que se construyen en el municipio.
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