Por acosar con “lo que se hace en el cuarto oscuro, en el cuarto oscuro se queda”, la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) emitió una recomendación por hostigamiento sexual a una estudiante de la carrera de Radiología de la Universidad de Guadalajara que realizaba sus prácticas profesionales en la Unidad Médica Tonalá Centro.
La emisión va dirigida al Ayuntamiento de Tonalá, a la Comisión Estatal de Atención a Víctimas y a la Universidad de Guadalajara (UdeG) para que realicen acciones específicas para erradicar este tipo de conductas.
La estudiante presenta trastorno por estrés postraumático, señalan las investigaciones hechas por la CEDHJ, acredita que un técnico radiólogo, encargado de supervisar sus actividades, con su conducta, violentó los derechos humanos a la legalidad y seguridad jurídica, igualdad en relación con el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia, libertad sexual, trato digno e integridad y seguridad personal, en perjuicio de la estudiante.
A través de un comunicado, la CEDHJ especifica varios puntos a cada instancia: al Ayuntamiento de Tonalá, garantice la reparación integral del daño ocasionado a la víctima, deberá cubrir “todas las medidas de restitución, rehabilitación, compensación, satisfacción y garantías de no repetición que resulten procedentes”.
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Además, de realicen las gestiones necesarias ante la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas para que lleve a cabo la inscripción de la estudiante en el registro correspondiente.
Como medida de satisfacción se solicitó que instruya a quien integra el procedimiento administrativo contra el radiólogo, de la Unidad Médica Tonalá Centro, Pbro. Rafael González González, de la Dirección de los Servicios Médicos Municipales, ubicada en el Cerro de la Reina para que otorgue el debido seguimiento a las etapas procesales y en su oportunidad, resuelva el asunto.
Asimismo, se solicitó que se realice un acto de reconocimiento público, donde se emita un pronunciamiento de cero tolerancias a la violencia contra la mujer; que se instaure al interior de ese municipio la Unidad de Género, que deberá de elaborar el Protocolo de Prevención, Atención y Sanción del Acoso y Hostigamiento Sexual o Laboral y, una vez que se encuentre aprobado, sea publicado.
Además, se instruya al servidor público señalado para que acuda al Centro Especializado para la Erradicación de Conductas Violentas hacia las Mujeres de la Secretaría de Igualdad Sustantiva entre Mujeres y Hombres, a fin de que se le proporcione la intervención integral para la erradicación de la violencia contra las mujeres; y se implemente un programa de capacitación al personal de ese ayuntamiento en materia de derechos humanos de las mujeres, de igualdad de género y de prevención, atención.
Aunque estas autoridades no están involucradas en la presente resolución, pero cuentan con facultades para investigar y en su caso, perseguir penalmente este tipo de conductas, se pidió al fiscal del Estado, gire instrucciones a quien integra la carpeta de investigación que se inició por estos sucesos, para que se otorgue el debido seguimiento a cada etapa y, en su momento, se resuelva.
A la Comisión Estatal de Atención a Víctimas, que se registre a la ofendida como víctima y se le otorgue la atención y reparación integral.
Mientras, que a la Universidad de Guadalajara para que se elabore un estudio estadístico sobre la violencia de género en la comunidad estudiantil que lleva a cabo sus prácticas profesionales y servicio social.
La CEDH señala que en el caso de estudiante se violaron los derechos humanos a la legalidad y seguridad jurídica, igualdad en relación con el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia, libertad sexual, trato digno e integridad y seguridad personal