La aporofobia son expresiones despectivas hacia las personas pobres que criminalizan la pobreza y tienen el poder de cambiar la realidad social, pues su significado representa un retroceso en la democracia de cualquier país. Este fue el tema de la Cátedra Latinoamericana Julio Cortázar, que contó con la participación de la catedrática de la Universidad de Valencia, Adela Cortina, quien en su conferencia magistral aseveró que cada individuo tiene el poder de decidir si aplicar o no la aporofobia.
Adela Cortina comentó que la aporofobia es utilizada en la política, donde los candidatos que emplean estos mecanismos ganan votos por el simple hecho de discriminar a ciertos sectores de la sociedad.
“Hay partidos que hacen propuestas aporofóbicas y dicen que van a acabar con los inmigrantes, a poner vallas a los inmigrantes, y ganan votos. Lo malo no es que haya partidos que propongan ese tipo de cosas, lo malo, y que yo estoy constatando, es que ganan votos y que efectivamente los partidos que no habían pensado en proponer semejante cosa, cada vez están proponiendo más porque se dan cuenta de que eso les da votos”.
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Por ello, es importante erradicar la aporofobia y crear ciudadanos maduros que no alienten los discursos de odio que dejan de lado a los inmigrantes o a los pobres y sus derechos.
La catedrática Adela Cortina insiste en que se debe tomar posición ante la aporofobia y que son los ciudadanos quienes deben rechazarla, pues, a pesar de que sus causas son biológicas y sociales, cada individuo tiene el poder de decidir si la acepta o la elimina de su círculo.
“Es decir, todos tenemos la tendencia a dejar de lado aquello que nos parece que no va a proporcionarnos nada bueno y a ponernos cerca de aquellos que sí nos pueden favorecer. Desgraciadamente, no hay posibilidad de discusión porque creo que la mala noticia hay que darla: hay una base biológica que es universal, pero les doy una buena noticia: que haya una tendencia a algo no quiere decir que haya una determinación a algo”.
En la migración existen constantes actos de aporofobia, ya que no todas las personas que son deportadas son tratadas de la misma forma, a pesar de que no cuenten con la documentación requerida. Ahí se demuestra que la falta de democracia en cualquier país se replica de esta forma.
La Cátedra Latinoamericana Julio Cortázar fue realizada en el paraninfo Enrique Díaz de León y forma parte de las actividades de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL).
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