Hasta este sábado no hay una sola persona que hayas ido detenida por el caso de la desaparición y homicidio de jóvenes del Call Center de Zapopan, ni siquiera el dueño de la casa ya que él fue requerido para declarar e ignoró los citatorios de la Fiscalía, por eso fue retenido y tienen prohibido salir de la ciudad.
El presidente del Supremo Tribunal de Justicia, Daniel Espinoza Licón, mencionó que “al día de hoy no ha habido ningún detenido por la desaparición de particulares o el homicidio, de esos al día de no hay detenidos, a quien se detuvo fue al arrendador del domicilio en donde se realizaba la actividad del Call Center, ya que se le citó por parte de Fiscalía, no atendió ningún citarlo”.
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Además, esa personas con una serie de pretextos evasivos trató a toda costa que no le entregarán un citatorio y cuando se logró entregar no compareció, de manera tal que como todos los ciudadanos tenemos la obligación de declarar cuando tenemos información incluso dijo no se tiene y ante la negativa de atender los citatorios” se integró la investigación por encubrimiento.
Es decir por su negativa a entregar toda la información que tenía disponible y que requería la Fiscalía para la investigación y ante esa situación es que se le detuvo pero hasta este fin de semana no se le vincula a los hechos delictivos de desaparición y homicidio de los jóvenes ya que no se le ha comprobado alguna relación en esos delitos.
Explicó que en un primer momento se le decretó la medida cautelar de prisión preventiva justificada porque no había atendido los citatorios de la Fiscalía y “él justifica su domicilio, su fuente de trabajo, sus propiedades y con eso genera arraigo, de manera tal que modifican su medida cautelar de la prisión preventiva a diversas como presentarse cada semana al tribunal, no salir del estado no del país, permitir la supervisión por la unidad de Medidas Cautelarás”.
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Daniel Espinoza indicó que estas medidas varias permanecerán hasta concluir el caso y no se le dictó prisión domiciliaria, lo que no puede hacer es salir ni del estado ni del país, someterse a la vigilancia e ir cada semana a firmar al tribunal ya que el delito que se le culpa no supera una pena de más de tres años.