La seguridad sólo es tema en las promesas de campaña, los robos a personas y a negocios van en aumento y los ciudadanos se defienden como pueden, algunos se preparan y otros toman la justicia por propia en mano... o al menos le dan un escarmiento extra al presunto ladrón, antes de ponerlo a disposición de la policía.
Son casi tres mil 200 robos los que se cometen por mes, mil 238 a casa habitación sólo en los primeros tres meses del año, de ellos mil 133 en ausencia de sus dueños y 105 casos por hombres armados que penetraron al inmueble haciendo uso de violencia.
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En el caso del robo de autopartes, de la que se habla de una impresionante cifra negra -personas que no denuncian y deciden ir a comprar las partes- de todas maneras hay 263 carpetas de investigación.
Los robos a negocio abundan, es un rubro donde se tienen mil 741 carpetas de investigación, donde 957 fueron con uso de violencia y otros 784 en ausencia de sus dueños.
NUEVAS COLONIAS SE ARMAN
Ante la incidencia, se suman algunas colonias a la autoprotección, varias que antes no se habían expresado y hoy llaman a los vecinos a mantenerse alertas, cerrar las filas y defenderse del hampa.
Es el caso de la colonia el Colli que durante los últimos meses ha presentado un incremento en la incidencia de robo con violencia a negocios y a vehículos… de hecho en la primera quincena de abril, de 59 automotores que se robaron en Zapopan, 15 casos ocurrieron en esa colonia, es decir, la cuarta parte.
Vecinos se quejan de la falta de patrullas, poca vigilancia nocturna, es difícil ver que por la zona circule alguna unidad oficial.
Reconocen que están más allá del Colli y otras colonias, que al menos para la autoridad no son prioridad y que han quedado relegados de su rango de acción y de esa manera rehúye a su responsabilidad.
Y ese coraje precisamente lo expresan en algunas de las mantas que han colocado con una gran alerta en principio “Precaución” y seguido del siguiente texto: “Vecinos cansados de robos y atracos ¡Nos Unimos! A la persona que se le sorprenda en actitud sospechosa o robando se le partirá su madre y se le consignará a las autoridades correspondientes. Vecinos vigilando”, termina el mensaje.
Las han colocado en las principales avenidas y algunas calles, seguros de que no habrá tolerancia para nadie.
NO HAY DETENCIÓN SIN ESCARMIENTO
El viernes 18 por la noche, en la colonia Educadores, una trabajadora del IMSS que viajaba a bordo de un camión de su trabajo a su casa, fue de pronto despojada de su teléfono celular por dos sujetos.
Ellos bajaron corriendo y se dividieron. La mujer fue tras el que tenía el teléfono y con la ayuda de un motociclista que pasaba por ahí, le dieron alcance.
Se lo entregó, pero los vecinos, que lo interrogaron, se mostraron molestos por que les mintió. Se dijo Fabián N. se dijo estudiante, y trabajador, pero fue sorprendido con el teléfono en sus manos, entonces arremetieron en su contra, lo golpearon y semidesnudaron, hasta dejarlo sólo en pantalón.
El escarmiento estaba dado. Lo vistieron y así lo entregaron a la policía que lo primero que hizo fue llevarlo hasta un puesto de socorros. El cómplice logró escapar.
Van mil 374 robos a personas entre enero y marzo que sufren de este delito en la vía pública y aquí lo sorprendente es que mil 87 de esos casos los responsables usaron armas de fuego, objetos punzocortantes e incluso amenazaron a sus víctimas con los puños, para quitarles sus pertenencias. Solo 287 casos fueron sin violencia.
Hay una división más y en espacio abierto al público, como plazas comerciales, se habla de otras ocho denuncias, siete con violencia y una más sin que el ofendido se diera cuenta.
Casos, como el que sufrió esta joven, se han incrementado y el robo en transporte público ya es una estadística por separado, donde reportan 25, de los que 23 fueron con violencia.
Y SI AMARRO MI CARRO AL CONCRETO…
Los robos de vehículos también se han incrementado en el primer trimestre del año y suman ya dos mil 902 de los que mil 424 son con violencia y mil 478 de estar debidamente estacionados.
Colonias como la Estancia, Vallarta, Vallarta San Jorge y la zona de alrededor de la Minerva presentan una seria problemática en ese sentido.
Es el caso incluso de algunos vecinos que han recurrido literalmente a amarrar sus automotores, a lo que sea.
EL OCCIDENTAL pudo detectar por la avenida Cordilleras varios casos así, como el de un Tsuru, uno de los modelos más robados en el mercado. En este caso su dueño incluso clavó una estaca de metal al concreto, encementó el área para reforzarla y de ahí, cada noche, amarra la llanta de su automotor a la banqueta.
En fin, la inseguridad sigue en los discursos de todos los candidatos y los ciudadanos la padecen, pero cada quien busca la forma de cómo defenderse.