En el Centro de Guadalajara surgieron las tortas ahogadas hace casi un siglo y este manjar se ha convertido en uno de los preferidos de tapatíos y turistas, quienes aprovechan cualquier oportunidad para disfrutar de su torta ahogada. Desde los que buscan algo rápido para almorzar y la piden en bolsita para llevar, hasta los que traen tiempo de sentarse a disfrutarla acompañada de un agua de sabor, un refresco o una cerveza, este platillo cada vez es más popular.
Te recomendamos:
Sobre el origen de las tortas platicamos con Guillermo Saldaña Vázquez, propietario de Tortas El Güerito la tortería que desde hace 65 años se estableció en la calle Madero a una cuadra de la Calzada Independencia y popularizó las tortas ahogadas. Él es hijo de don Ignacio, quien a sus 91 años ya no acude al negocio pero a distancia se llena de orgullo de saber que sus hijos Guillermo, Claudia, Nacho y Carmela continúan con las tortas que él les enseñó a hacer tras haber aprendido el oficio con “el güerito” original afuera de la cantina La Alemana, donde se cree que hicieron las primeras tortas ahogadas en los primeros años del siglo pasado.
¿Cómo surgió el nombre?
“Dice mi papá que una señora fue por su esposo a la cantina, que ya tenía días ahí tomando y tras convencerlo de salir compró una torta con el güero y él la pidió con mucho chile y a ella se le antojó pero al güero se le cayó de las pinzas al chile y la señora dijo ‘yo no la quiero ahogada’ y ahí empezó el nombre de torta ahogada”.
A decir de Ignacio, “la torta ahogada antes era con birote salado, carnitas y con chile, no había ni limón, ni cebolla, ni rábanos como ahora se le pone, dice mi papá que ni salsa de jitomate, era mucho chile o poco chile”.
Por azares del destino su padre decidió emprender su propio negocio en 1959 y desde esa fecha continúa en el barrio de San Juan de Dios, a unas cuadras del emblemático mercado y le puso El Güerito en honor a su ex patrón el güero, que fue el iniciador de las tortas ahogadas que ahora distinguen a Guadalajara en el mundo. Han visto pasar de todo en ese lugar, donde antes abrían desde el amanecer y cerraban a la media noche, pues al estar ubicados cerca de muchos centros nocturnos, de la Plaza de los Mariachis y de la Arena Coliseo, ahí día y noche había gente y muchos buscaban qué comer.
Encantaron a famosos
A mitad del siglo pasado el Centro tapatío concentraba el movimiento de la ciudad y artistas y personalidades de la farándula cuando visitaban Guadalajara se hospedaban en hoteles cercanos a las Tortas de El Güerito donde recibieron a Mike Laure, Vicente Fernández, Lucha Villa y muchos otros famosos a quienes recuerdan que se comían las tortas ahogadas en puro chile.
Por estar muy cerca de la Arena Coli- seo también sirvieron tortas ahogadas a luchadores leyendas como El Salto, Blue Demon y El Cavernario que se hospedaban en un mesón al lado de donde están las tortas por la calle Madero. Ahora la mayoría de famosos han dejado de acudir a la zona, pero el flujo sigue y aunque ya no hay tantos clientes como antes, la tradición de 65 años y el compromiso de preservar el negocio de quien vio surgir las tortas ahogadas llena de emoción a los cuatro hermanos. “Muchos hoteles de aquí cerca nos recomiendan, llega la gente de otros estados o países y preguntan por unas tortas ahogadas y los mandan aquí, eso nos gusta y nos pone felices, llegan muchos, varios de Estados Unidos”.