El Gobierno de Jalisco lanzó un nuevo llamado a quedarse a casa por 15 días y especialmente los adultos mayores; para don Jorge Luis Ramírez Orozco, aún con 68 años de edad, eso es más que imposible; dependen de él su esposa y su hijo, con una bajísima pensión, se introdujo en el negocio de llevar comida a domicilio vía plataforma y hoy se le ve recorriendo las calles de la ciudad, a toda velocidad, en su bicicleta.
“Ha bajado este negocio”, acepta, desde que inició hace dos años y cinco meses en el mismo para la aplicación de Uber Eats, pero “aún deja para comer”, y justo cuando él creía que se iba recuperando, después del botón navideño, otra vez la ciudad vivirá una pausa por dos semanas.
Te recomendamos:
Sí suben las ventas, pero cada “botonazo”, son menos, no se compara, señala, cuando antes de que llegara la pandemia.
“Llegué a este negocio por necesidad y le estoy muy agradecido”, dice sonriendo, para luego recordar, con un rictus de amargura, como es que trabajó por 30 años en Correos, empezó de cartero -de ahí el amor a la bici- y fue jubilado con una pensión que él califica como “bajísima” de apenas 3 mil pesos mensuales.
“Me alcanza para pagar la renta, pero necesito más dinero, de mi dependen mi esposa y mi hijo.
“Viendo gente que estaba trabajando, comencé a preguntar y me dijeron que salía bien, se fue para abajo con la pandemia, pero para comida alcanza”.
Don Jorge no parará durante estos 15 días que el Gobierno de Jalisco ha determinado nuevas medidas restrictivas, tiene un trabajo, un compromiso con su familia y una tarea que realizar, llevar comida a casa.
Podrá darse unos minutos para descansar -como lo sorprendimos- pero asegura que con cubrebocas en rostro y en su bici, seguirá: “Gracias a Dios ni me duele nada y espero seguir así, trabajando”.