Hoy, hace seis meses exactamente, arrancó en operaciones Mi Macro Periférico mejor conocido como Peribús en la ciudad, y de cara a ello, ciudadanos todavía reniegan de algunas fallas registradas en el servicio.
Si bien, no faltaron quienes reconocieron las bondades de este servicio de transporte, otros tantos más aludieron a las complicaciones que continúan para abordar unidades en ciertas estaciones por la mañana o en horas pico, elevadores que no funcionan en su totalidad o fallas incluso en las mismas máquinas para recargar la tarjeta de prepago.
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"Me terminé acostumbrando a tomarlo, al inicio era bien complicado porque con las rutas te revuelves, pero pues le vas agarrando la maña, lo malo es que todavía ves gente que se equivoca de unidad y luego a veces ni los guardias te saben explicar bien", consideró Raúl, quien se mueve de Periférico Sur hacia la zona de Ciudad Judicial todos los días.
"Los elevadores que siguen siendo una lata cuando fallan, como las (escaleras) eléctricas del tren, y luego también ver que mucha gente que no necesita (el elevador) lo toma y también por eso luego no funcionan, se desgastan por quienes no deberían usarlo y cuando alguien que sí lo ocupa es ahí donde se pone difícil la cosa", añadió Claudia.
"Creo que trataron de organizarlo y no lo lograron, si no te pones bien abusado te puedes subir al que no es, porque el mapa no ayuda mucho. Faltó mejor señalizarlos, porque el Macrobús está mejorcito en eso, es decir una sola ruta, ya sabes, parador y exprés", añadió Rogelio Mojica.
Algunos usuarios manifestaron incluso que la máquinas para recargar las tarjetas de prepago se tragan el dinero, mientras que por el otro lado hubo quienes consideraron que el servicio del Peribús se les hace mejor que el desorden que imperaba antes con las diferentes rutas.
"No sé, yo siento que está un poco más ligera la movilidad, o sea, sí, hacen falta más unidades para que no se llenen de más, pero te sientes más seguro en estas (unidades) que a la deriva en un 380 por ejemplo, como que entras a las estaciones y te sientes más tranquilo", agregó Ángela Medrano.
“Como todo, es perfectible. El macro es utilizado por muchísimas personas y es lógico pensar que haya fallas, pero seamos honestos, es eficiente y buena la idea, es solo cuestión de mejorar detalles. Yo me muevo bastante rápido y quizá el único pero que le pondría es que se llena mucho, pero también pasa con el tren, el Macrobús y los camiones”, expresó Noé Sánchez.