El partido Hagamos exigió que cesen las provocaciones y se garantice el libre tránsito a todas las vecinas y vecinos del barrio de San Rafael que amanecieron con un policía a la puerta de su casa, bloqueando puertas y cocheras para dar inicio a la instalación de un acueducto en la calle Mariano Azuela, obra que llevará seis semanas. Los vehículos que estaban estacionados en la zona fueron remolcados con grúa.

Con base a videos y testimonios, la dirigencia estatal de Hagamos denunció que contra toda legislación aplicable y en clara violación a sus derechos de libre tránsito, existen pruebas que las y los vecinos se encuentran encerrados en sus propias casas, que a partir de actos de intimidación y la instalación de dichas vallas, impiden el acceso y movilidad a sus propios hogares.

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Recordaron que en días pasados, legisladoras y legisladores de diversas fuerzas políticas aprobaron un punto de acuerdo para exhortar a las autoridades del gobierno estatal y de Guadalajara para detener el ecocidio que ha venido registrando y se respete dicha suspensión provisional. Hasta el momento ninguna autoridad ha dado explicaciones de su actuar mientras los vecinos del parque San Rafael siguen padeciendo represión e intimidación en sus propias casas.

Hagamos exige entonces que éstos y todos los derechos de los ciudadanos sean respetados:

• Que cesen estas provocaciones y se garantice el derecho a libre tránsito de todas las personas afectadas
• Que se respete la decisión judicial de mantener la suspensión provisional o bien, que se explique bajo qué orden jurídico se sustentan sus hechos
• Se atienda al exhorto del Congreso del Estado y se llegue a un acuerdo en que se tome en cuenta la opinión de los vecinos y se evite, a toda costa, el mayor daño al medio ambiente y se garantice el derecho a una vivienda digna.