El actor y bailarín tapatío Izaak Alatorre es parte del elenco de la película El rey de todo el mundo que fue grabada en nuestra ciudad. Al respecto, platicó para El Occidental.
De esta cinta, comenta “El rey de todo el mundo lo terminamos de grabar después de dos meses, mi personaje es Juan, es un chavo que tiene inquietud por la danza y decide entrar a esto, aparte le gusta el box, por eso decide hacer esto. Además cuando está en la obra tiene limitaciones porque no es un grandioso bailarín, soy un poco rival de Diego, el personaje de Isaac Hernández y se topa con esto, aunque tiene muchas ganas de hacerlo y por eso se juegan el papel principal”.
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Un gran reto “El reto fue aprender más de baile, soy bailarín de estilos urbanos, hip hop. Tomé clases de danza contemporánea en la licenciatura pero no me fui por ese camino, ya tenía mucho que no lo hacía y cuando me dicen que el personaje tiene que bailar y enfrentarse a uno de los mejores del mundo empecé a tomar clases otra vez, técnicas y dos semanas antes fue intensivo ya con el coreógrafo oficial de la película que nos empezó a montar lo que van a ver en pantalla”.
Se siente feliz “Me siento emocionado, cuando me dijeron que se iba a grabar todo acá, encantado, tengo cinco años viviendo en Ciudad de México, pero aquí nací y no podía venir tanto por mi trabajo, aquí está mi familia, mis amigos y eso se volvió mucho más tranquilo porque tenía mi gente cerca”.
Sí se parece a su personaje “Tengo bastantes cosas en común con Juan, aparte de que a ambos nos apasiona el baile, yo no hago box pero me gusta ejercitarme, voy al gimnasio y eso también tenemos en común, en la película él no es un buen bailarín pero tiene garra y fuerza para ir por el papel principal, me veo reflejado en él, en estas ganas que tiene”.
Y de la dirección, agrega “Carlos Saura nos dio una libertad que no creía, estaba nervioso porque no sabía cómo era trabajar con él, me daba un poco de miedo y él nos dio tanta libertad que me sorprendió. Después de los primeros días me sentí tan cómodo como no me había sentido en otras producciones. Además trabajar con Ana de la Reguera, con Isaac Hernández, con Vittorio Storaro que hizo estas escenografías, fue espectacular”.