Como parte de los eventos programados dentro del Conjunto Santander de Artes Escénicas, destaca la próxima presentación de Elio Villafranca para el 26 de marzo próximo.
En entrevista con El Occidental, Elio destacó que para esta ocasión y antes de su presentación musical realizará una Master Class para dar a conocer sus conocimientos del jazz y, posteriormente, presentar su concierto de su disco “Cinque”, una historia de esclavitud que es un homenaje a sus raíces y sus tradiciones.
“Feliz de estar en Guadalajara y presentar este disco el cual es lo que estoy utilizando formas de música que no se usan en el jazz. En el jazz latino se usa más la rumba o el 6 por 8, que también están presentes en mi música, pero la conga, que la uso también, es algo que la gente no lo hace mucho en el jazz”.
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El músico originario de San Luis, en la provincia cubana de Pinar del Río, y migró a Estados Unidos en 1995, también destacó que Cinque, que le llevó investigar y producir 15 años, es el resultado de "un trabajo de toda la vida" y un homenaje a sus raíces y sus tradiciones.
Cabe destacar que el jazz, la llamada forma de arte estadounidense, no se habría incubado en las salas de baile y las calles de Nueva Orleans si no fuera por las tradiciones musicales de África.
“Cierra con una conga festiva y muy abiertos, que incluyen formas musicales cubanas con conga, trompetas y otras formas de ritmos hasta con sartenes y llantas de carro, muchas cosas cotidianas que usa la población cubanas” señaló.
Entérate:
El pianista Elio Villafranca es tanto un culto de esa historia de origen como un intérprete seductor de la misma, con la sensibilidad persuasiva y armónica para poder contarlo.
“Es una de las pocas historias con final feliz, teniendo en cuenta de que se trataba de algo brutal y sanguinario. La trata de esclavos es uno de los momentos más bajos de la humanidad y esa fue la parte triste de la historia del esclavo" relató Villafranca.
También recordó que los africanos, durante los años de esclavitud, “tuvieron que coexistir en ese nuevo mundo, reinventar su historia sin instrumentos y despojados de todo, recrear el tambor. Y tiene sentido porque donde está presente el tambor como en Cuba, Haití o Brasil, con una identidad muy fuerte”, finalizó.