La calificadora Fitch descarta una ruptura en el TLCAN

La agencia de calificación Fitch Rating, descartó una ruptura del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), y que el resultado final no debería impactar en el acceso comercial de México a Estados Unidos.

Sin embargo, la reciente prórroga de las negociaciones y los comentarios de los funcionarios que participan en las rondas de negociación, muestran una creciente incertidumbre y riesgo para el tratado, aseguró la calificadora.

“Si Estados Unidos se retira del TLCAN, habría inmediatamente un golpe a la confianza y volatilidad de corto plazo en la economía mexicana”, puntualizó.

En un análisis de la calificadora, explica que los autos mexicanos y otros sectores manufactureros diversificados estarían entre los segmentos más expuestos de la economía, debido a la sustancial interconexión entre las cadenas de suministro en la región.  “Los automóviles se verán directamente afectados si se imponen aranceles más elevados. Asimismo, sectores no manufactureros como bienes raíces, comercio minorista y banca también se verían afectados por el menor crecimiento, la menor confianza de los inversores y la volatilidad cambiara. Sin embargo, el alto nivel de integración de la cadena de suministro y las ventajas de costos subyacentes de la fabricación en México seguirían siendo un incentivo para la producción en este país, dependiendo de la escala de las nuevas tarifas”, detalla.

Subrayó que ante una eventual terminación del TLCAN, provocaría una “significativa incertidumbre” para la economía mexicana, afectando la confianza de los inversionistas y una inminente volatilidad en los mercados.

Añade que si Estados Unidos se retirara del TLCAN sería además probable que la economía mexicana se desacelerará a mediano plazo ya que las disrupciones iniciales probablemente redundarían en una menor inversión.

Este escenario provocaría además alteraciones comerciales, lo que causaría efectos en la confianza del consumidor. El final del TLCAN tendría asimismo un impacto negativo en la productividad, lo que afectaría las tasas de crecimiento potencial a mediano y largo plazo.

Advierte que la eventual cancelación del acuerdo mejoraría la competitividad de las industrias mexicanas que están orientadas a la exportación.