Las rutas de violencia en Colima, Zacatecas y Michoacán preocupan a los exportadores de Jalisco, ya que el 90% de su mercancía en algún momento se trasporta por tierra y han aumentado los asaltos, por lo que el presidente de Consejo Mexicano de Comercio Exterior de Occidente (Comce), Miguel Ángel Landeros Volquarts, se reunió con personal de la Secretaría de Seguridad Pública para expresar sus preocupaciones.

Indicó que entre los acuerdos alcanzados está mantener un diálogo constante con las autoridades estatales para informarles en tiempo real lo que suceda con los camiones y su mercancía, pero también notificar de los lugares en donde consideran que pueden tener robos, en especial cuando comience a exigirse la llamada Carta Porte.

“Más del 90% de la carga se mueve por carretera y preocupa ese asunto, aparte ahora que la Carta Porte sea una realidad pueda tener una incidencia mayor porque se van a compartir datos sensibles de qué se lleva y qué valor tiene, por eso es un momento importante estar cerca de la autoridad para mostrar esto y ver cómo disminuimos el robo de carga”.

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En ese sentido, Landeros Volquarts, dijo que la ruta comercial más significativa es la de Manzanillo-Jalisco, en donde la entidad tiene un alta incidencia del comercio exterior y desde su punto de vista es histórico como los grupos de delincuencia o bandas saben el valor de la mercancía que sale y entra el puerto.

“Pero allá se da poco el robo y viene a concentrarse más acá” -principalmente- en las carreteras federales, lo mismo sucede en los Altos de Jalisco y en el corredor industrial de El Salto.

Esta situación les implica que ellos tengan que destinar entre un 10 y 20% adicional a sus presupuestos para implementar un mecanismo de seguridad como los de rastreo y vigilancia, además de que uno de cada tres transportes de carga está asegurado y el resto no lo puede hacer porque el precio no haría rentable el servicio.

Además hay choferes que no quieren ingresar a ciertos lugares y en diversos horarios.

El compromiso de las autoridades estatales es mantener constante comunicación, expresar qué les sucede en tiempo real para contar con asistencia en el menor tiempo posible y con los operativos carreteros que las mismas autoridades implementen conforme a sus condiciones de personal disponible.