La autoestima es la percepción buena o mala que tenemos de nosotros mismos. Trabajar en aceptarnos como somos tiene beneficios en el crecimiento personal y la autoconfianza, elementos clave para hacer cambios positivos en nuestra vida.
La baja autoestima puede desencadenar una depresión severa si no se trata a tiempo con la ayuda de especialistas en el área. El primer paso ante señales de una mala autoestima es identificar qué aspectos de nuestra vida nos desmotivan y nos gustaría cambiar.
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Tener una buena percepción de nosotros mismo no nos convierte en personas orgullosas ni egocéntricas. Una buena autoestima se trabaja todos los días y éstas son algunas técnicas para elevarla:
Actitud positiva
Cada persona tiene la capacidad de elegir cómo reaccionar ante las circunstancias de la vida. Una actitud optimista te dará la confianza de que las cosas que te propones son posibles. Valora los pequeños logros cada día y siéntete capaz de alcanzar tus metas.
Aprende siempre
Todas las experiencias nos enseñan algo. Piensa que eres un aprendiz e intenta encontrar el aprendizaje en todo, esto te mantendrá con curiosidad y ganas de indagar más en tus intereses.
El fracaso no es tu enemigo
Fracasar no es malo como muchas personas piensan. En el desarrollo personal es inevitable fallar, cada vez que algo no salga como esperas tómalo como una oportunidad para mejorar. No seas tan duro contigo mismo y compórtate como lo harías con tu mejor amigo.
Cuida tu apariencia
Vístete con tu ropa favorita y arréglate como a ti te gusta. Cuidar tu aspecto te dará autoconfianza y una mejor autoimagen.
No hagas caso de lo que piensen los demás
Aléjate de las personas negativas y tóxicas que no te aportan nada. Toma decisiones con base tus instintos y tu forma de pensar, no te cuestiones si las demás personas van a estar de acuerdo con tus acciones.
Apoya a otras personas
Mostrar una actitud servicial hacia las demás personas te hará sentir una persona útil. Saberte valioso por haber brindado apoyo te ayudará a construir una percepción más positiva hacia ti mismo.
Se creativo
Realizar una actividad como pintar, coser o bailar hará que tus ideas fluyan y te expreses con creatividad. Desarrollar nuevas habilidades aumentará tu autovaloración y sentido de competencia.
Escribe tus logros
Tener presentes las cosas que hemos logrado nos recordará de qué somos capaces. Coloca una lista de tus logros donde puedas verla diario, algunas opciones pueden ser el espejo del baño, la mesa de noche o el fondo de pantalla de tu celular
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