Muchos de nosotros hemos experimentado somnolencia después de comer, esto no es casualidad, puesto que el sueño y la alimentación son dos aspectos que van de la mano. Si comes sanamente tu sueño será reparador, si comes alimentos altos en grasa y azúcar es muy probable que tu calidad del sueño se vea afectada.
Esa intensa somnolencia que nos llega después de comer ha sido apodada por los mexicanos como “El mal del puerco”, y aunque muchos creen que el sueño que nos da después de ingerir alimentos es causado por comer demasiado, la realidad es que en la mayoría de los casos se debe a ciertos alimentos que consumimos y que favorecen a la sensación de cansancio.
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El horario de comida importa
De acuerdo con el vicepresidente de la Sociedad Española del Sueño los humanos estamos unidos a nuestro reloj biológico, esto significa que nuestro organismo se regula en función de la luz y la oscuridad. Las personas tenemos dos momentos de somnolencia en el día, uno es durante la noche y el otro ocurre ocho horas después de haber despertado, lo que coincide generalmente con la hora de comida.
El azúcar provoca sueño
¿Alguna vez has sentido mucho sueño después de comer algo azucarado? Esto se debe a que cuando el azúcar pasa por la sangre provoca una disminución de orexinas, las hormonas encargadas de mantenernos alertas y concentrados, es por eso que si en tu comida está muy presente el azúcar lo más seguro es que se te antoje una larga siesta después de comer.
Al contrario del azúcar, alimentarse con proteínas aumenta la actividad de las neuronas que se encargan de producir orexinas y nos mantienen despiertos por más tiempo.
¿Cómo oponerse al sueño después de comer?
Lo más importante es mantener un sueño nocturno que cumpla con al menos siete horas seguidas para poder rendir en el día. También existen algunos alimentos que nos ayudan a combatir la sensación de cansancio y funcionan como estimulantes, éstos son el té, el café y el chocolate.
¿Qué alimentos dan somnolencia?
Existen algunos alimentos que por naturaleza aumentan los niveles de melatonina, lo que se ve reflejado en la presencia de somnolencia. Los alimentos que promueven el sueño del organismo son el arroz, el maíz, las fresas, el plátano, el tomate y el vino tinto.
Así también, el L-triptófano es un aminoácido que favorece el sueño y se encuentra en el queso, el pavo, la piña, las almendras, y los cereales.