En el sexo y en el amor todo se vale, o al menos es lo que muchos hombres piensan y lo que muchas mujeres permiten.
Posiciones, fetiches y formas de tener una relación sexual hay muchas, según la creatividad y lo que la pareja lo permita, pero también existen los niveles básicos, y estos a veces son pasados por alto.
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¿Qué es el sexo vainilla?
El sexo vainilla es el coito sin aderezos ni complementos; es un momento de contacto y placer mutuo en el que no existe un lado dominante.
En este tipo de sexo no hay acrobacias, solo posturas seguras y sin tanta varidad. Por lo regular la más empleada es la conocida como "el misionero".
Este tipo de acto se da mayormente en las primeras veces, pues aun no hay tanta confianza y no se conocen los fetiches sexuales de cada uno.
Con el paso del tiempo en una relación, se puede seguir empleando, en mayor medida cuando más que placer se busca conectar emocionalmente con la pareja.
Caricias, abrazos, besos y un ambiente romántico es todo lo que se necesita para llegar al climax con el sexo vainilla.
¿Cómo surge el término "sexo vainilla"?
Este término se comenzó a emplear a finales de los 90 por practicantes del Bondage, dominación, disciplina, sumisión, sadismo y masoquismo, también conocido como BDSM.
Dicha expresión resultó de la comparación de la penetración y acudir a una heladería italiana a pedir un helado de vainilla; pues al parecer este helado era muy común y "meter y sacar" en el sexo, a estas personas les parecía igual de común.
Lo que sabemos es que hoy un helado de vainilla también puede tener sus variantes.
Pocos hombres son expertos en el sexo vainilla
Para algunos, el sexo vainilla puede resultar aburrido, sobre todo cuando la industria pornográfica ha venido a llenar la mente de ideas aberrantes con respecto a la sexualidad.
La razón por la que pocos hombres son expertos en esta práctica tan sencilla, siendo el nivel básico de la sexualidad humana, es porque tienen una idea errónea de lo que satisface a la mujer, y en cierta parte las mujeres llevan responsabilidad por no saber comunicarlo.
Nalgadas, azotes, juguetes sexuales, cachetadas, sexo duro y otras prácticas son consideradas eróticas, pero no todos pueden llamarse fanáticos.
A los 40 años los hombres sienten una necesidad de experimentar una sexualidad más libre y creativa, sin embargo, la experiencia ya los acompaña por lo que es más probable que un hombre a esta edad sepa darle gusto a su pareja con un buen sexo vainilla. En pocas palabras, ya saben como hacerle el amor a una dama.
Cada individuo tiene gustos distintos, puede haber hombres que de verdad disfrute del sexo vainilla, y mujeres que prefieran la aventura y experimentar. Y cualquiera de los casos es respetable, siempre y cuando haya consentimiento por el o la compañera sexual.