Para atender la salud mental de las niñas, niños y adolescentes en crisis, las familias se enfrentan a un muro tridimensional como es el tiempo, distancia y costos, además se enfrentan a la falta de accesibilidad, de instituciones y de servicios de salud comunitarios.
Aunque exista voluntad política por atender los trastornos de la niñez, urge descentralizar los servicios de salud mental para que tenga acceso equitativo y cercano a la comunidad, se pronunció la especialista en psicología de la Universidad Autónoma de Querétaro, Pamela Garbus al dar conocer un “informe diagnóstico por regiones”, durante la XXXVI Asamblea General de la Red Mexicana de Ciudades Amigas de la Niñez.
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“Si vamos, tenemos la posibilidad, la atención y la meta de mejorar el acceso a la atención en salud mental de la niñez, pensemos en la descentralización como un elemento primordial, porque en todo el país los servicios de salud mental y sobre todo los especializados se ubican en las cabeceras”.
La especialista, lamentó que antes de dar una atención integral a la población infantil con algún tipo de trastorno sea internado en instituciones psiquiátricas.
“Me llamo muchísimo la atención cómo es que, en todos los municipios, cuando se preguntan en donde debería canalizar a una niña, niño y adolescente en crisis, la respuesta es en instituciones psiquiátricas”.
Agregó: “No digo que no requiera de una atención de un profesional de la psiquiatría, lo que estoy diciendo en donde se encuentra en un hospital psiquiátrico o en un centro de salud ¿resuelve la situación o arma a una red con las familias’ o internan a la niña o al niño que implica el aislamiento”.
La especialista exhortó a las y los integrantes de la Red Mexicana de Ciudades Amigas de la Niñez a trabajar en conjunto con los municipios para contar con espacios comunitarios en salud mental.
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“Hay una ausencia muy grande de instituciones dedicadas a eso, los municipios presentan tienen como meta en desarrollar estas instituciones que puedan dar respuesta a estas necesidades tan urgentes como el de la salud mental de las infancias”.
Otro aspecto que resaltó durante el informe del diagnóstico fue que las familias se enfrentan a una barrera tridimensional para poder atender a sus hijas e hijos como son: el tiempo, distancia y costos.
“No van porque esa distancia es costosa en términos en que pueden perder una jornada laboral de su papá o mamá, de transporte les es imposible porque ni siquiera saben en dónde están, en todos los grupos y de manera fuertemente mayoritaria respondieron que la distancia desde donde se ubica las comunidades, las familias hasta el servicio de salud mental que pueda dar atención a sus niños es una barrera de acceso”.
Durante la XXXVI Asamblea General de la Red Mexicana de Ciudades Amigas de la Niñez, realizada en el Centro Internacional de la Amistad, el alcalde de Guadalajara Pablo Lemus pasó la estafeta y tomó protesta a su homólogo de Zihuatanejo, Jorge Sánchez Allec y a los representantes de nueve municipios que integran la Red:Teocaltiche, Tizapán El Alto, Casimiro Castillo, Manuel Doblado, Valle de Bravo, General Escobedo, Mineral de la Reforma, Jojutla y Tlaxcoapan.