Albercas improvisadas, agua helada, ventiladores, enfriadores y hasta ropa ligera son algunas de las alternativas que tienen los tapatíos para mitigar la intensidad del calor que se ha vivido en las últimas semanas pero sólo son temporales.
Emiliano García, un joven de 17 años plática que él busca refrescarse durante el día tomando agua, con el ventilador prendido y si sudó mucho se baña con agua fría o tibia hasta en dos ocasiones en el día, pero no es suficiente porque no aguanta el clima.
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Mientras que Joel Martínez, vendedor de tacos dice que con el calor la gente casi no sale a comer para evitarse andar en la calle, sus ventas sí bajan después de las 12 del día porque como que la gente no quiere salir de su casa para evitar que me hace con el sol y aunque tiene en su puesto sombra, no es suficiente para atraerlos.
Margarita Castillo mencionó que ella hace agua frescas y tiene fruta en el refrigerador para que con eso todos se bajen un poco el calor y sus hijos andan con ropa corta y descalzos en la casa para que por lo menos no sientan más calor con las calcetas y zapatos.
Mariana Alvarez, de siete años, dijo que el sudar cuando juega es lo que le incomoda y busca la forma de bajarse el calor ya sea con una nieve, agua fría o lo que sea porque no aguanta el calor que cada vez es más fuerte y siente que quema la piel más que otros años.
En algunos fraccionamientos con ingreso controlado, los vecinos que tienen mayor confianza entre ellos, instalan albercas provisionales para que sus hijos puedan refrescarse y pasar un rato agradable, colocan sombras para que estén bajo los rayos del sol de forma directa.
Pero todo esto son acciones temporales que mitigan los efectos solares, pero al cabo de unos minutos las sensaciones de que se quema la piel y falta de viento regresan y sobre todo de sombra en las calles para resguardarse de la radiación solar .
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