El representante jalisciense en la disciplina de lucha, Manuel López, viene en plena recuperación, después de haberse sometido a una cirugía de ligamento cruzado en la rodilla derecha, la cual se realizó el pasado mes de julio.
“La cirugía se realizó el 29 de julio, prácticamente acaba de pasar el mes de haberme operado, todo fue exitoso, me pusieron un injerto de ligamento cruzado porque estaba muy dañado el que tenía y me arreglaron un poquito los meniscos. Llevo muy buen cambio en la parte de la fuerza, no tengo tan atrofiada la rodilla, me sirvió de mucho tener los músculos fuertes antes de la cirugía, entonces, he avanzado bastante y la flexión está casi por completo, me faltan 25 grados nada más para recobrar la totalidad de la flexión, de ahí, ya sería recuperar el tono muscular e ir poco a poco adaptándonos”, compartió el medallista de plata en los pasados Juegos Panamericanos.
“Estoy yendo una vez al día por las mañanas, de lunes a sábado, es una sesión larga con diferentes aparatos de electro-estimulación y ultrasonidos, enfocados directamente a la parte de la lesión y sobre todo al fortalecimiento, ya estoy trabajando para recuperar bien el tono muscular y de ahí empezar con los movimientos de flexión y voy muy bien, la verdad”, comentó sobre la rehabilitación, la cual le llevará entre 4 y 5 meses para volver a entrenar al cien por ciento.
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De igual forma, contó a que se debió esta lesión, pero contó que es un acumulado de varias que ha tenido en su carrera como atleta, pues hoy con 29 años de edad, es ya todo un experimentado en el estilo grecorromano.
“Es el conjunto de varias lesiones que se han dado a lo largo de mi carrera deportiva, la más reciente fue a finales del 2018; hice un movimiento luchando, como tipo tacle, y mi pierna se quedó en medio de la pierna del contrario, él se giró de lado, entonces, quedó atrapada mi rodilla y me la rotó, sentí que me tronó”.
“Después de que me hicieron la resonancia, salió que internamente la rodilla tenía ciertas lesiones en los meniscos de diferente grado y el ligamento cruzado se veía casi roto en su totalidad”.
Por último, contó que sigue motivado, positivo y con la esperanza intacta de llegar en su mejor forma al evento clasificatorio para los Juegos Olímpicos de Tokio del próximo año, boleto que espera poder conseguir.
“Por mi parte voy a ser muy constante, muy profesional y con el objetivo bien puesto, yo tengo confianza que el tiempo será suficiente y que mi entrenador va a saber dirigirme de manera adecuada. El doctor me dijo que si las cosas avanzan bien, de acuerdo a la evolución que vaya teniendo, en enero ya voy a estar entrando al 100 por ciento con mi rodilla nueva”.
“Voy a tener aproximadamente cuatro meses, espero que sean suficientes para que con una buena planificación llegar en buena forma deportiva al evento que es el importante para buscar la clasificación a los Juegos Olímpicos”.