En Atlas siguen haciendo honor a su historia, que es la de dar lugar a los jóvenes, de que debuten en el máximo circuito y vayan tras sus sueños de trascender en su carrera como futbolistas profesionales. Fue en la primera fecha del Guard1anes 2020, cuando el técnico de los Zorros, Rafael Puente, ya debutó al primer juvenil canterano en el torneo, se trata de Jairo Mungaray, quien juega como delantero y ha vivido todo el proceso formativo en las básicas rojinegras.
“Yo inicié jugando beisbol a los seis años, porque a mi papá le gustaba. Estuve hasta los nueve ahí, veía a mi hermano mayor jugar futbol y me empezó a llamar la atención. Ahí fue cuando le dije a mi papá que quería jugar futbol, porque me gustaba más y lo disfrutaba mucho, entonces mi hermano me ayudó a conseguir un equipo en Magdalena. Después pasé a otro equipo nuevo que se formó, nos juntamos con otro de Hermosillo y vinimos a un torneo en Guadalajara varias veces", compartió sobre sus inicios en el futbol.
Jairo inició su carrera en Atlas en 2016, jugando para la sub-15 que obtuvo el bicampeonato en las temporadas 2016-2017, después vino una semifinal y final con la sub-17.
“Los valores que tenemos en la institución me han ayudado muchísimo. Desde la casa club, donde te enseñan a ser responsable, a valorar cada cosa que uno tiene; los entrenadores, que siempre nos exigen y que quieren lo mejor para nosotros, nos forman muy bien futbolística y personalmente. En Instituto nos dan hasta la prepa, pero después nos siguen exigiendo la educación, para no quedarnos solamente en el deporte, porque no sabes hasta dónde va a llegar”.
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Finalmente, habló sobre lo que significó su debut en el máximo circuito con Atlas, un momento que siempre se le quedará grabado, pero que también lo exige para no aflojar y mantenerse en el camino correcto para consolidarse como un recurrente en los Zorros.
“En la semana me enfoqué en entrenar, en hacer las cosas bien, y creo que gracias a eso me consideraron para la convocatoria con el equipo. Ya estando allá, uno va mentalizado en lo que va a hacer, y si se da la oportunidad, disfrutar el momento y dar todo por estos colores”.
“Fue un momento que me quedé en shock, pensé en mi familia, en todo lo que había pasado, y que sería una gran oportunidad y convencido de dar el máximo. Mis compañeros me felicitaron, me dijeron que fuera por más, que no me quedara solo ahí, que buscara algo más grande, que me exigiera al triple de ser posible.
"Mis papás, mi hermano y pues toda mi familia estaba muy emocionada y orgullosa por ese gran logro, porque desde un principio, de todos los esfuerzos que han hecho por mí, los viajes, los gastos, los momentos que no podemos estar juntos, creo que al final de todo, vale la pena”.
Quiero seguirme esforzando, mantenerme, aprovechar el momento que me toca vivir. Voy a hacer bien las cosas para, en un futuro, tener un registro en Primera División. Para mí es muy importante, es el club que me abrió las puertas, que me formó como persona, me dio todo y estoy muy agradecido. No queda más que agradecer y corresponderlo con futbol Jairo Mungaray, atacante canterano
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