En Atlas han dejado muy en claro la importancia de la cantera, de darle su lugar a los jugadores formados en la Academia rojinegra, hasta que sean la base del primer equipo, pues de esta manera mantendrán su etiqueta de equipo formador de talentosos mexicanos en beneficio del futbol nacional.
Uno de esos formadores en Atlas, es Jorge Bermejo, quien es el entrenador de la Sub-15 rojinegra, quien acaba de llegar para hacerse cargo de la categoría en la que actualmente los Zorros son los campeones.
“Ha sido una buena encomienda la que nos dejaron. El equipo quedó campeón el torneo pasado con una muy buena actuación, rompiendo récords, donde me tocó participar de auxiliar técnico. Ahora en esta nueva faceta, como el encargado de llevar al grupo otra vez a esas instancias que tenemos trazadas, veo fuerte al grupo, metido como estaba hace seis meses. Debemos mantener la dinámica y agresividad que mostramos en el torneo pasado, y ponerle ese sello característico para buscar el marcador en todo momento”, dijo Bermejo.
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“Es un punto muy importante dentro de la institución: tener a los jugadores desde pequeños, para que tengan un ADN rojinegro, que sientan los colores y se empapen lo que es estar en este club, la identidad y la metodología, para que poco a poco sientan que Atlas es el equipo a vencer, siempre con el trabajo como base. Desde chicos se les inculcan valores, el sentimiento de pertenencia, y eso los va llevando día a día a superarse y a generarse expectativas hacia futuro. En caso de que el jugador no logre llegar a Primera División, tiene un proceso de formación como persona también, que es el enfoque de fuerzas básicas: formar a la persona, para a través de eso llegar al futbolista”.
Y para lograr cada uno de los objetivos trazados y cumplir con las metas y tiempos, en Atlas se han preocupado por estar dando constante capacitación al cuerpo técnico, para que logren mejorar ellos junto a los jugadores que están encaminando.
“Mínimo una vez a la semana nos juntamos todos con Albert Espigares para ver nuestros partidos, analizar el desempeño y visualizar las mejoras que se pueden hacer, también para capacitarnos como entrenadores y que así se pueda reflejar en las siguientes jornadas. Eso ha sido una constante que nos ha hecho crecer como entrenadores individual y grupalmente, porque todos opinamos, estamos al pendiente de las categorías, desde infantiles hasta profesionales. Las reuniones que tenemos sirven para enriquecer, sembrar y cosechar resultados”.
“Se trabaja con jugadores, cuerpos técnicos y todo el personal que trabaja en Atlas, para que los chicos se sientan orgullosos de portar el escudo de este club, no solamente en sus etapas de formación, sino que ya como profesionales quieran poner a la institución en lo más alto. Después, que se pongan metas en lo personal y laboral, pero siempre con el sentido de pertenencia y el amor a la camiseta al frente. Una prueba de esto es cuando van a Selección: automáticamente se ve quiénes son los de Atlas, por su manera de comportarse, de dirigirse y de tratar a los demás, porque van representando lo que se les inculca en el club”.
