Con pasado en Astros de Jalisco y hoy enfrentándolos en la gran final, Jeff Ledbetter solo guarda buenos recuerdos y un sentimiento especial por el equipo tapatío, a los cuales, Rayos de Hermosillo ha superado sin mayores complicaciones en los dos primeros partidos de la serie.

“Es difícil. Amo esta ciudad, amo a los fans, amo a la organización. Algunos de los jugadores son mis amigos, es difícil pero tienes que separar eso, cuando el balón está en el aire es hora de trabajar y el mío es ganar y ayudar a mi equipo lo más que pueda y pelear. Eso es lo que hago, pero mi corazón ama a Guadalajara”.

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A pesar de ser un jugador querido en la afición, no han dudado ni un segundo en hacerse sentir desde la tribuna hasta la duela, con abucheos y gritos en su contra. Sin embargo, Jeff no lo considera anormal, por el contrario, es algo que espera siempre, eso si, guardándoles un gran respeto.

“Lo entiendo. Ellos tratan de entrar en mi cabeza, quieren ganar también. Hice un triple y los callé y no es irrespetuoso, estamos peleando por ganar el campeonato, pero me alegra que empujen, son apasionados y tratan de ayudar a que su equipo gane”.

En la profesión, lamenta que el ciclo normal sea cambiar de equipo en cada temporada y tener que enfrentar a buenos amigos temporada tras temporada.

“Es la parte difícil de este trabajo, cada año estás en un equipo diferente y tienes que jugar contra gente que te cae bien, pero es trabajo y lo hago. Cualquier cosa que tenga que pasar, pasará”.

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