De nueva cuenta, San Francisco 49ers avanzaron al Super Bowl tras dejar a los Detroit Lions en el camino y el único obstáculo que les queda para ganar el Vince Lombardi son los Kansas City Chiefs de Patrick Mahomes y Travis Kelce.
De la mano de una espectacular voltereta en la segunda mitad, los 49ers de San Francisco volverán al gran juego tras imponerse (34-31) a los Detroit Lions en la final de la Conferencia Nacional.
Kyle Shanahan y sus jugadores tendrán la oportunidad de poder sacarse la espina luego del Super Bowl que perdieron en 2020, donde Patrick Mahomes y los Chiefs les ganaron el Vince Lombardi. Ahora volverán a cruzarse en la edición 58 en Las Vegas, Nevada.
El juego se dividió en dos partes, una para cada equipo. Durante la primera mitad, Detroit dominó en ambos costados del emparrillado.
La ofensiva comandada por Jared Goff le pasó le por encima a la que en teoría era la mejor defensiva de la liga para detener el juego terrestre, y fue justamente por esa vía donde Dan Campbell intentó superar al líder de la NFC.
Entre David Montgomery y Jahmyr Gibbs superaron las 100 yardas terrestres, con una anotación cada uno. El Levis Stadium no podía creer la exhibición visitante, que se fue al descanso con ventaja de 17 puntos (24-7).
Pero el escenario cambió para el complemento. Ahora fue San Francisco quien se adueñó del momento, con el factor suerte de su lado. Primero una carambola le permitió a los 49ers anotar un touchdown en las manos del receptor Brandon Aiyuk.
A la siguiente serie ofensiva, el corredor novato Gibbs cometió un error infantil. Para perder el ovoide en su propio terreno de juego, acción que los locales no desaprovecharon y empataron con la segunda anotación del partido para Christian McCaffrey. Un cuarto le bastó a los 49ers para igualar el marcador.
Ya en el episodio definitivo, Brock Purdy llevó el balón hasta territorio de su pateador. Jake Moody, quien acertó un intento de 33 yardas para que por primera vez en el encuentro tomaran la ventaja. El Levis explotó, con el Super Bowl a la vista.
Cuando parecía que los Lions estaban contra las cuerdas, Campbell regresó a las bases. Utilizó el ataque terrestre para mover las cadenas y ponerse en zona de puntos. Pero decidió jugarse una cuarta oportunidad en una zona donde podrían haber igualado con un intento de 48 yardas.
Lo agresivo en el juego de Detroit les pasó factura. No solamente se fueron en blanco. Sino que San Francisco empezó a correr el balón entre Purdy y McCaffrey, para que Elijah Mitchell lograra el touchdown del triunfo.
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Ahí se acabó el sueño del “caballo negro” de la NFC. En el último minuto, los Lions anotaron otro TD que solamente sirvió para hacer más decoroso el marcador.
Publicado originalmente en ESTO
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