El escritor, Marco Antonio Beltrán, habló de su más reciente novela titulada "Ojos de color”, el texto romántico en donde desarrolla la vida de Pablo que está en preparatoria y viviendo un proceso de aceptación a su orientación sexual. Mismo que presentó el pasado 3 de mayo en la Feria Municipal del Libro de Guadalajara.
¿De dónde nace la inspiración para escribir?
Desde niño me gustaba mucho leer y escribir, creo que nací sabiéndolo, al final de las hojas de mis cuadernos escribía cosas muy pequeñas. Me quedaba solo en casa y no socializaba porque mis hermanos al ser mayores, se dedicaban a los estudios o al trabajo y como una forma de no volverme loco, escribí.
¿Hay autores que infundan en ti la pasión por las letras?
Uno de mis autores favoritos es Óscar Wilde, de quien leí "El retrato de Dorian Gray" y de ahí hasta que conocí a Stephen King, otro de mis autores favoritos; leí primero "Misery" de él, quedé muy impactado, muy maravillado de cómo lo redactaba, cómo lo hablaba, cómo lo describía.
¿Cómo fue crear 'Ojos de color'?
Fue un proceso lento y necesitaba que quedara lo mejor posible. Fue mucho trabajo y hacer “El secreto de Amanda” no lo planeé, es como el hijo que salió de pílón. Mucha gente me ha pedido una segunda parte, según yo había quedado un final cerrado, al contrario de Ojos de color, que se planeó desde un principio, tal como lo dije en la presentación: una experiencia propia me llevó a tocar fondo y en el proceso terapéutico se me pidió que expresara mis emociones y esto fue a partir de la escritura. Sabía que necesitaba explicar mucho, por ello hay planeada una secuela, que creo nunca lo he dicho pero se llama "Miradas de color".
Como proceso terapéutico ¿Ha funcionado?
Alivia mucho, me llevó a mucha aceptación propia. No es solo hablar de una comunidad que ha pedido equidad. Siendo yo parte de la comunidad, fue un proceso el poder sanar heridas porque me callé mucho y busco que esta historia pueda ser una inspiración para muchos que se quedaron como su servidor, callados y temerosos de ser juzgados, etiquetados y rechazados.
Estuve muy triste, muy solo, me preguntaba si realmente a mí también me tocaría sentir eso que yo veía en mis amigos heterosexuales, porque yo veía que duraban mucho y festejaban.
¿Qué falta para que sea visto con "normalidad"?
Es la intención de Ojos de color, que se haga una visibilidad. Es algo que les va a costar a ciertas comunidades y generaciones también, a las que han crecido en ámbientes machistas, yo tengo un padre machista y una madre que ha caído en este rol de "soy mujer y me toca hacer esto porque soy mujer". Para mí, es cambiar eso, sí hay una familia que te apoya a pesar de ser católicos, sí hay personas que te aceptan a pesar de quienes lo ven como antinatural. A mí me gustaría preguntarles ¿Qué es antinatural?
Debemos dejar de poner etiquetas a algo que hacemos todos los días. Nos enamoramos, nos ilusionamos, compartimos la vida con una persona indistintamente de su sexo, de su género, de su orientación.
¿Te identificas con el personaje principal de tu libro?
Muchas de las cosas que hace Pablo y de las que hace otro personaje de nombre César, esas emociones que pongo en ellos también las viví, sentí miedo, sentí dudas, sentí que hacía bien, sentí que hacía mal, sentía que de alguna manera mentía a las personas que más me importaban. Me identifico en ellos en muchas cuestiones, porque la parte romántica de Pablo, al ser tan libre y que su familia lo sepa está genial, pero está el otro lado de la moneda, quien no puede expresarlo.
En mi caso, me habría gustado que estuviera mi mamá para darme un abrazo al ser rechazado por una persona que me gusta, o que mis hermanos me dijeran que todo iba a estar bien.
¿Cuál es tu opinión en relación a la promiscuidad y la comunidad LGBTTTIQ+?
En algún momento me ha tocado escuchar de otro compañeros "Nosotros no nacimos para la estabilidad" y bueno, creo que es parte de la percepción de la persona y son etiquetas que nos hemos adjudicado que no nos toca tener.
Somos parte de este mundo y no tenemos porqué ser completamente diferentes solo porque ya lo somos. Me gustaría decir algún día: Tengo más de diez años con mi pareja y soy muy feliz y que si me preguntan “¿ha sido difícil?”, decirles que nos hemos agarrado del chongo, nos hemos abrazado, hemos pasado momentos muy románticos; es que eso es una relación. Eso es lo que quiero que mis lectores perciban al leer Ojos de color.
¿Qué sucede en la familia con un proceso como el de Pablo?
Lo decía el maestro Francisco en la presentación "los padres siempre esperan mucho de los hijos, pero no vamos a ser lo que los padres quieren", por ello es difícil cuando tu hijo, al que has estereotipado de "yo te voy a acompañar al altar y te voy a entregar a aquella mujer" y de repente te das cuenta que eso ya no va a pasar y a lo mejor te idealizaste que te iba a dar nietos y ya no los va a poder tener de la manera que te gustaría.
Hay una ironía porque los padres lo saben todo y (yo) años batallando para que siempre lo supieran.
Así como no puedo cambiar quiénes son (padres), tampoco pueden cambiar quién soy, porque quizá no es algo con lo que se nace, pero en algún momento de tu vida lo sabes. Hoy lo puedo decir a los 4 vientos, soy gay, lo he sabido desde siempre y no hay ningún problema porque yo lo sé.
¿Qué se siente tener fans?
Nunca me imaginé el impacto que iba a tener, en mi mente tenía la idea de "No va a funcionar, no soy tan bueno". Me siento realizado con el acompañamiento que me han dado las personas: pareja, hermanos y mi familia que no es de sangre.
Me siento feliz y orgulloso de los comentarios que recibo de mis lectores al darme cuenta que logré transmitir y conectar con las letras que en algún momento plasmé.
¿Qué le dirías a las personas que escriben y sienten miedo de compartirlo?
Escribe con emoción, en el momento en que te sientas inspirado y no te la pienses, tienes que hacerlo, con las emociones al rojo vivo.
Más allá de imitar a autores conocidos, eres tú, eres tu esencia, se queda así y se entiende así, listo.