A unos días de cumplir 80 años el arquitecto Fernando González Gortázar, falleció, y el mundo de la arquitectura lamenta su deceso. El arquitecto fue considerado como uno de los más importantes de América Latina y su obra circula por todo el mundo.
En Jalisco se puede apreciar en el ingreso monumental del Parque González Gallo, así como otras grandes y magestuosas obras.
¿Quién fue Fernando González Gortázar?
Fue hijo de José de Jesús González Gallo y Paz Gortázar Gutiérrez. Estudió arquitectura en la Universidad de Guadalajara y obtuvo su licenciatura en 1966, presentando como trabajo de tesis el proyecto de un Monumento Nacional a la Independencia.
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Entre sus obras más importantes están La Gran Puerta que se ubica en el Parque Amarillo, la Fuente de la Hermana Agua, el ingreso al Parque González Gallo; La Torre de los Cubos, la Plaza Fuente, la Casa González Silva, el Paseo de los Duendes, el Museo de la Cultura Maya, el Centro de Seguridad Pública y el Centro Universitario de Los Altos de la Universidad de Guadalajara aún inconcluso, entre otras.
El Gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, a través de sus redes sociales mencionó que “hoy México se despide de uno de sus más grandes arquitectos, de los más importantes de Latinoamérica, Fernando González Gortázar; un hombre de visión y valores que, en Jalisco, deja un legado para la posteridad. A su familia y seres queridos mi más sentido pésame. D. E. P.”
Agregó que su nombre será recordado por “siempre dentro y fuera de México, por trabajos que le dieron la vuelta al mundo, como La Fuente de las Escaleras, en Madrid, El Árbol de El Escorial, en España, o La Columna Dislocada, en el Hakone Open-Air Museum, en Japón, entre muchos más”.
Mientras que en las redes sociales de la Secretaría de Cultura se lamentó su fallecimiento y mencionan que fue “considerado en el ámbito contemporáneo como uno de los arquitectos más completos e importantes del país y de Latinoamérica”.
Además se mencionó que renovó las tradicionales concepciones del urbanismo y paisajismo, tomando como inspiración la arquitectura monumental prehispánica. Recibió el Premio Henry Moore y el Premio Jalisco en Artes Plásticas, ambos en 1989 y el Premio América de Arquitectura en 2009.